Inventa tamaulipeco método para enseñar matemáticas
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El ingeniero civil, Ernesto Navarro Cumpeán, viajó tres veces a Israel y dos España con la intención de escribir un libro sobre hidráulica.
No obstante, la guerra entre Israel y Palestina, que acontecía en aquel tiempo, lo hicieron cambiar el rumbo e inventar un método para enseñar matemáticas a niños y adolescentes.
Así nació el método conocido con el nombre de "MERYAD " que le ha permitido al maestro Ernesto Navarro preparar a estudiantes de primaria y secundaria con un coeficiente intelectual alto, en el aprendizaje de álgebra, trigonometría, cálculo diferencial e integral, apenas en un año de asistir a sus clases en Ciudad Victoria.
Originario de Palmillas, Ernesto Navarro Cumpeán posee una preparación académica extraordinaria pero es aún más brillante en su altruismo y humanismo, porque las clases que imparte a niños y jóvenes son totalmente gratuitas.
¿DE DONDE SALIÓ ESTE INGENIERO CIVIL, AHORA MATEMÁTICO?
En entrevista con Periódico 5inco, Navarro relata que nació en Palmillas y estudió Agronomía en la UAT campus Victoria.
"Luego estudié la Maestría en Uso y conservación del Agua en el ITESM; después estudié la Maestría en Docencia, en la facultad de Ciencias de la Educación de la UAT. Mi tesis fue un estudio sobre la enseñanza-aprendizaje de las matemáticas”, comenta.
Durante nueve años, Navarro trabajó como docente en el tecnológico de Ciudad Victoria, impartió las materias de hidráulica, tipografía e ingeniería de riego.
"Mi pasión siempre fue la hidráulica de los sistemas de riego a presión. Esto originó a que en tres ocasiones fuera a estudiar al Estado de Israel y dos veces a España... Yo quería escribir y publicar un libro sobre la ‘Hidráulica de los sistemas de riego por microaspersión’”.
-¿Y qué sucedió... escribió el libro?, se le pregunta.
“Pero la última vez que estuve en Israel, algunos acontecimientos ocurridos allá y relacionados con la guerra entre Israel y Palestina, me hicieron cambiar de idea”, dice.
“Recordé mis estudios de tesis y las investigaciones que yo ya había hecho con mis hijos en la enseñanza-aprendizaje de las matemáticas y deseando hacer un bien a la sociedad”.
“Eso hizo que mi interés cambiara totalmente... abandoné el interés en el libro de hidráulica y me metí de lleno en crear una metodolgía que facilite y motive el aprendizaje de las matemáticas".
Al llegar a México el Maestro Navarro intentó por todos los medios, que los que ostentaban el poder político en México y Tamaulipas conocieran su descubrimiento y así beneficiar a la educación pública. Navarro quería aportar a la sociedad, y qué mejor que la de su País, pero fue rechazado una y otra vez.
"Desde que inicié, esto que estaba descubriendo, lo hice del conocimiento del entonces gobernador Tomás Yarrington, Vicente Fox, Eugenio Hernández, Egidio Torre, Felipe Calderón... nunca hubo algo positivo de ninguno".
Y más triste aún, otros países como España y Costa Rica recibieron con los brazos abiertos el invento para enseñar y aprender matemáticas del Ingeniero Tamaulipeco, mientras lo condecoraban con todos los honores y él mismo pagaba sus viajes para asistir a congresos mundiales.
"Ante tanto rechazo e indiferencia, hablé a la Embajada de Cuba en México y les dije ‘señores, tengo algo muy valioso que les quiero regalar’”.
“Ellos me dieron el mail del Ministerio de Educación en Cuba; les escribí y en menos de 24 horas me enviaron invitación para asistir al congreso Mundial de Pedagogía que se realizaría en la Habana, Cuba. Fui con mi esposa a Cuba y con gran satisfacción para mí porque mi ponencia la ubicaron entre las mejores cinco del congreso", dice el ingeniero.
Pero sus viajes a Israel no fueron en balde, gracias a su estancia en aquel lugar, Navarro escribió un libro que fue editado por la Universidad de Málaga en España y que se encuentra a la venta con el nombre de “Cartas desde Israel, ese mismo libro fue rechazado por el ITCA de Tamaulipas.
"Cuando estuve en Israel la tercera vez; ante la imposibilidad de realizar prácticas de campo por los problemas de la guerra, me dediqué a escribir los acontecimientos diarios. La Universidad de Málaga España en dos semanas me lo publicó en internet y un año después lo editó y puso a la venta en librerías de ese país".
Actualmente el Maestro atiende a un grupo de sexto año de primaria; primero y segundo de secundaria que ya están aprendiendo trigonometría.
"Algunas veces doy clases en mi casa pero el grupo actual lo tengo en la casa de enlace de la Senadora Andrea García. Yo llevé los mesabancos y el pizarrón pero ya me pusieron uno nuevo...las clases son de lunes a jueves de 5:00 a 6:30 pm".
Navarro Cumpeán agradece el respaldo de su esposa Rosalba Acosta Hinojosa y sus hijos Adriana y Ernesto, que lo acompañan a lo largo de sus investigaciones y son parte fundamental de este proyecto de enseñar matemáticas a niños y jóvenes victorenses.
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