Muere de noche; los rescatan de día
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- La Rumbo Nuevo se cobró otra vida la madrugada de este jueves.
Ahora, la víctima fue una mujer que viajaba de copiloto en un automóvil Chevrolet Cavalier, mientras que el conductor sobrevivió apenas, pero su vida pendía de un hilo cuando los encontraron, horas después.
El percance, de acuerdo con información de Tránsito municipal, ocurrió aproximadamente a las 01:30 horas de la madrugada, pero no fue sino hasta las 07:00 horas que el automóvil destrozado fue descubierto.
Automovilistas que pasaban por el lugar hallaron el coche y llamaron a los cuerpos de emergencia, arribando Cruz Roja para hallar el cadáver de Camerina Rojas Castro, quien en vida contaba con 43 años de edad.
Asimismo encontraron inconsciente pero aún vivo a Liborio Costa Hernández, de 51 años, con ambas piernas rotas y múltiples heridas.
NADIE LOS VIO
La colisión ocurrió sobre el kilómetro nueve de la carretera Rumbo Nuevo, cuando el Chevrolet Cavalier conducido por Costa Hernández, con placas XJD-24-68 de Tamaulipas, salió del camino y se estrelló de frente contra una estructura de concreto.
Al interior del vehículo, el conductor quedó prensado de ambas piernas, mientras que su copiloto, Camerina Rojas, sufrió fractura de cráneo y costillas que le arrebataron la vida en cuestión de minutos.
El intenso dolor y la conmoción provocaron que Rojas Castro quedara inconsciente, incapaz de llamar y pedir auxilio, quedando abandonados a su suerte.
Horas más tarde, cuando amaneció, fue que el automóvil fue descubierto por otros automovilistas, así como obreros de una planta trituradora cercana al lugar, quienes dieron aviso a los cuerpos de auxilio.
Tras rescatar del interior del coche al conductor, paramédicos lo trasladaron de urgencia a una clínica del Seguro Social para atender sus heridas y potencialmente salvarle la vida; a esas alturas, se encontraba en estado crítico.
Mientras tanto, agentes de la Policía Investigadora dieron fe del cadáver de Camerina Rojas y ordenaron el traslado de sus restos a la morgue del Servicio Médico Forense para que le fuera practicada la autopsia de ley.