AMLO es responsable de la división de las izquierdas: Barbosa

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El presidente saliente de la Cámara de Senadores, Miguel Barbosa Huerta, ubica aLópez Obrador como uno de los responsables de la división de las izquierdas, cuya unidad en este momento advierte muy difícil.



“Es uno de los grandes culpables, claro que sí, de la división. El no admite más que el pensamiento de él, él debería estar, sin duda, generando condiciones de acuerdo y de acuerpamiento; muchos, en esas condiciones, estaríamos con una visión muy cercana a él”, subrayó.



Así lo expresó el senador perredista en el marco del relevo de la Mesa Directiva de la Cámara alta, quien agregó que el anhelo de unidad de las izquierdas es cada vez más difícil concretarlo al reiterar que “ni los comportamientos de AMLO son propicios para esa unidad”



El legislador del Sol Azteca reveló además que si en alguna ocasión se ha hablado de conformar una comisión para buscar el acercamiento con Andrés Manuel López Obrador no ha sido con otro propósito que trasladar los costos políticos del distanciamiento al político tabasqueño, pues están muy conscientes de que éste no quiere caminar con el PRD.



En este tenor, consideró que su partido debe hacer cambios de fondo que lo hagan nuevamente atractivo a la sociedad y no solo mostrar una imagen nueva.



Cuestionado sobre su balance en torno a los primeros tres años del presidente Enrique Peña Nieto, el político optó por reservar su opinión para luego de recibir el III Informe de Gobierno y conocer también el mensaje del titular del ejecutivo Federal de un día después.



No obstante,  dejó en claro que el país se encuentra mal  y que la situación por la que atraviesa no puede seguir siendo la misma, particularmente en áreas como la económica y la política social, aunque reconoció que en materia de relaciones exteriores los resultados son favorables.



Respecto de una eventual contrarreforma fiscal, Barbosa Huerta compartió su expectativa de que el Senado siga siendo un órgano de reflexión, responsable y capaz de decirle ¡No! al Ejecutivo Federal y que en este tenor, esa instancia legislativa esté dispuesta a revisar las cosas, de las reformas aprobadas, que no funcionaron bien.