Deja Gattás sin ingresos a abuelitas y sus familias 

Cientos de humildes victorenses son condenados a la miseria por el alcalde 

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El alcalde Eduardo Gattás Báez aprovechó que actualmente hay un paro de labores en los juzgados federales, para desalojar violentamente los puestos de antojitos mexicanos de mujeres de la tercera edad de las afueras del Hospital General de Ciudad Victoria, ya que hace una semana ellas y otros oferentes solicitaron un amparo en contra de dicha acción y hasta el lunes al mediodía todavía no era atendida su petición. 

Fue el abogado Manuel Balderas Méndez, quien advirtió que agentes viales bajo el mando de dicho edil incurrieron en daño en propiedad ajena, al romper candados de los comerciantes con el fin de trasladar sus carretones al corralón municipal con una grúa. 

Así mismo realizaron este operativo en horas de la madrugada, cuando los afectados no estaban en el lugar del desalojo, para presentar alegatos en su defensa. 

De tal manera que fueron violadas varias garantías, sobre todo en contra de mujeres de la tercera edad. 

Balderas Méndez manifestó que, una vez que se reactiven los juzgados federales y reciban la protección de los mismos, van a reinstalar los carreteros en los sitios donde tienen décadas operando y también cumpliendo con el pago de la cuota diaria que les pide el Ayuntamiento. 

Así mismo insistirán en la instalación de una mesa de diálogo a través de la cual se establezcan compromisos de mejora de las condiciones de operación de los puestos de antojitos.

Entrevistado afuera de dicho nosocomio, el defensor manifestó que actualmente las personas desalojadas por la fuerza están viviendo una difícil situación económica junto a sus familias, ya que, aún y cuando son personas mayores, tienen a su cargo nietos e, incluso, hijos en situación de vulnerabilidad.

Además de que algunas tienen ayudantes que con su trabajo también sostienen a sus familias.

-Abogado, ¿cómo ve la situación ahorita de los comerciantes afectados? ¿cómo están viviendo ahorita el día a día?- le preguntamos. 

“Mira, te voy a ser muy honesto: es una situación muy precaria, te estoy diciendo que independientemente a cada uno de los locales, los puestos que no están trabajando, no nada más se ve afectado el dueño, sino tres a cuatro familias más. Entonces estamos hablando que están afectando por local a un promedio de 15 a 16 personas”, dijo.