Pastora cristiana dejó la iglesia para convertirse en stripper

Tras descubrir que era bisexual, Mitchell abandonó la iglesia y afirma que es más feliz que nunca
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Nikole Mitchell ha tomado por asalto los titulares alrededor del mundo gracias a un cambio radical de vocación: dejó de ser pastora cristiana para convertirse en stripper.

A veces las vocaciones llegan de formas misteriosas. Hace unos años Nikole Mitchell era una cristiana devota cuya meta era trabajar en la iglesia. Sin embargo, tras convertirse en pastora cristiana un episodio cambió su vida. Meses después de haber sido nombrada pastora, acudió a una obra de teatro que abordaba temas LGBT, donde tuvo una revelación sobre su propia persona: descubrió que era bisexual.

Tras ese descubrimiento en 2016, llegaron años de cambios. En su canal de YouTube habla de su salida del clóset, sobre la forma en que concilia su sexualidad con la religión y sobre cómo lentamente se fue alejando del culto para buscar otra vocación.

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Pero los primeros pasos en su transición de pastora a stripper no fueron inmediatos. Según contó en el New York Post. Nikole Mitchell primero tuvo que lidiar con una familia conservadora que veía con malos ojos que fuera pastora, aunque siempre recibió el apoyo de su entonces marido y de sus hijos.

Los cambios más radicales llegaron cuando Mitchell decidió abrir una cuenta de OnlyFans, una plataforma en línea comúnmente utilizada por trabajadoras sexuales. Según ha declarado “siempre quiso ser stripper”. A su parecer, este nuevo trabajo no es más que la realización de un viejo sueño.

Ante las críticas de conocidos y desconocidos, Mitchell es muy franca: “Nunca fui tan feliz”, escribió su cuenta de Instagram.

“Si pudiera sumar de lo que he aprendido en estos cuatro años en llegar a casa para mi misma, sería esto: Puedes confiar en ti misma. […] Si dejas la Iglesia como yo lo hice, no le das la espalda a Dios”, escribió.


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Ahh! The New York Post picked up my story!! And it’s true: I have never been more at home in my power, in my radiance, and in my divine essence. And I have never been happier. If I can sum up what I’ve learned these past 4 years in coming home to myself, it’s this: -> You can trust yourself. I know there are a lot of voices that have a lot of opinions on what you should and should not do, should and should not be, but you are the only one who knows who you came here to be. Trust yourself, listen to yourself, and BE yourself. The world will adjust. -> God goes with you. If you left the church like I did, you didn’t leave God behind. God went with you and will continue to go before you, stay beside you, and close all things behind you. God’s got you, boo. -> Life is beautiful on the other side. It’s scary to step into the unknown. We’ve been taught to fear ourselves, fear our desires, and fear the nudges of our hearts. But I’m telling you - your desires are leading you to a place that is so beautiful and expansive and free, you’ll be SO GLAD you took that leap of faith. Life really does get better. ❤️❤️❤️ Thank you to everyone who has loved and supported me, both on this journey and in the publishing of my story! I am so humbled, honored, and grateful. You truly make the world a beautiful place.☺️❤️ ❤️❤️❤️ You can read the article in my bio! ❤️❤️❤️ (Huge thanks to @makka_rena and @nypost for sharing my story!)

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Según afirma, desde que abrió su cuenta de OnlyFans en 2019, ha ganado en confianza y en aprecio hacia sí misma. “Mi sexualidad es sagrada”, declaró para el New York Post sobre si siente que hay un conflicto entre seguir creyendo en Dios y ser trabajadora sexual.

Actualmente, Nikole Mitchell vive en la ciudad de Los Ángeles, California, con sus tres hijos. Se ha separado de su marido. Además de su trabajo como stripper en OnlyFans, también se desempeña como coach de vida.