El origen de la frase “Me da mi calavera”

El Día de Muertos en México es común encontrar a niños en las calles que entonan la famosa frase “¿me da mi calaverita?”.
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Las celebraciones por el Día de Muertos en México están cada vez más cerca; sin embargo, debido a que estamos en plena pandemia de COVID-19, los niños no podrán salir a las calles a entonar la famosa frase “¿me da mi calaverita?”.

Aunque es frecuente escuchar esta petición entre los pequeños que piden dulces los días 1 y 2 de noviembre, no se sabe con exactitud cuál fue su origen.

Una versión indica que la frase “¿me da mi calaverita?” data de la época prehispánica, cuando un niño macehual que no tenía recursos pidió ayuda para poder colocar comida en la ofrenda de sus familiares.

Otra anécdota narra que en realidad el niño macehual quedó huérfano; al no tener medios para subsistir, decidió pedir “calaverita” para conseguir víveres.

Erik Mendoza, especialista en antropología entrevistado por El Universal, refirió que la frase “¿me da mi calaverita?”, usada comúnmente el Día de Muertos, podría estar influenciada en la época novohispana y la cultura europea, específicamente en la celebración denominada Halloween.

En la época novohispana, los creyentes del naciente México ofrecían oraciones a reliquias con el objetivo de ser perdonados de sus pecados; posteriormente y con el paso de los años, la actividad se transformó a la veneración de los difuntos.

En esta práctica las personas con recursos podían poner altares a sus familiares fallecidos, pero quienes no tenían dinero pedían una especie de limosna en forma de “calaverita” para poder ofrecer algo a sus difuntos.

La influencia del Halloween proviene desde la celebración del Samhain por parte de los celtas y galos. Según Erik Mendoza, esas culturas “se disfrazaban o pintaban para ahuyentar al espanto y dejaban una vela para que los malos espíritus no pasaran”.

Con esta explicación se entiende que la celebración del Día de Muertos en México integra varios elementos, mismos que difieren según la zona del país.

Aunque este año será distinto a otros debido a las restricciones de movilidad, lo importante es que las familias no olviden a los seres queridos que se les adelantaron en el camino.