Alumna de CBTIS confiesa que adoptó a un perro sólo para matarlo

Vanessa “N”, una joven alumna de CBTIS, ha causado una ola de indignación nacional después de que trascendiera su escalofriante acto de crueldad: adoptar a un perro sólo para matarlo. El terrible hecho tuvo lugar en Huachinango, Puebla.

Este lamentable suceso ocurre en un país donde, a pesar de la existencia de leyes contra el maltrato animal, su aplicación sigue siendo deficiente y los casos de crueldad suelen quedar en la impunidad. La furia generada por el caso de Vanessa 'N' ha dado lugar a un debate a nivel nacional sobre la importancia de la educación en el respeto a los animales y la necesidad de reforzar la legislación y su aplicación en este ámbito. La expectativa es que la conmoción causada por este caso pueda ser un catalizador para un cambio de actitud en el trato a los animales.

El caso salió a la luz a raíz de una denuncia ciudadana, que reveló una conversación en la que Vanessa habría confesado su cruel intención detrás de la adopción del perrito, a quien le tomó la vida de forma despiadada y lúdica.

De acuerdo con la denuncia, Vanessa habría atado al cachorro y lo mató con un arma blanca, para luego dejar que se desangrara. Las imágenes del canino muerto y las capturas de pantalla con la confesión de Vanessa causaron una gran conmoción y furia en la sociedad.

Repercusiones de un acto de crueldad

En la presunta conversación, la joven admitía sin reparo que había adoptado al perro precisamente con el propósito de matarlo. Además, revelaba que estaba asistiendo a terapia psicológica debido a sus acciones.

La crueldad extrema desatada sobre el cachorro provocó que diversas organizaciones protectoras de animales exigieran la intervención inmediata de la Fiscalía General del Estado, pidiendo que se castigue a la responsable.

Posteriormente, estudiantes del Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTis) 86 de Huachinango se manifestaron en protesta por el acto de crueldad cometido por su compañera Vanessa sobre el perrito, al que habían bautizado como "Huellitas".

La comunidad estudiantil reacciona

El cachorro Huellitas, que se había convertido en la mascota de la escuela, era querido por la comunidad estudiantil. Los estudiantes colocaron docenas de carteles exigiendo justicia por el brutal asesinato.

Vanessa N., estudiante del plantel, había adoptado a Huellitas, quien era muy apreciado por los alumnos. Tras ver las imágenes publicadas por la adolescente, sus compañeros quedaron sorprendidos y asustados.

En una red social, los estudiantes cuestionaron a Vanessa, quien respondió que había matado al cachorro por diversión. Además, confesó que había pensado hacerlo contra un gato, pero que vio en Huellitas una "opción más sencilla".

Exigiendo justicia para Huellitas

Como respuesta a la atrocidad cometida, los estudiantes del CBTis de Huachinango han demandado la expulsión inmediata de Vanessa. Solicitan también que la joven y sus tutores ofrezcan una disculpa pública junto al director de la institución y al subdirector.

Adicionalmente, los jóvenes exigen que se refuercen los temas de cuidado y respeto hacia los animales en el currículo escolar, así como el reforzamiento de las materias de civismo, ecología y humanidades.

La Unidad Especializada de Investigación de Delitos contra los Animales, adscrita a la Fiscalía General del Estado (FGE), ha sido llamada a abrir una investigación para deslindar responsabilidades.

Los impactos en redes sociales

Las redes sociales se convirtieron en el principal foro para expresar la indignación y el rechazo por el acto de crueldad de Vanessa. Usuarios de Twitter, Facebook e Instagram compartieron su repudio y pidieron justicia para Huellitas.

Vanessa, quien usaba el usuario @v4nezsa_ev1ls666 en sus redes, compartió en sus estados imágenes del cadáver del perro después de su presunto asesinato. Las capturas de pantalla de una conversación en WhatsApp donde aceptaría sus actos, también se viralizaron.

En dicha conversación, Vanessa responde a la pregunta de por qué asesinó al can: "De hecho, mi objetivo principal era matar a un gato, pero como era difícil y se me presentó la oportunidad, dije: 'Ah, va'".

Consecuencias legales para Vanessa

La joven también confiesa que desechó el cuerpo del perro y comenta que planea asistir al psicólogo por sus actos.

Es importante mencionar que el maltrato animal en Puebla se castiga con una multa de hasta 2 millones 074 mil 800 pesos y hasta 4 años de prisión si se provoca la muerte de uno o varios animales.

El caso de Vanessa sigue en desarrollo, mientras la comunidad local y nacional esperan ver un acto de justicia para Huellitas y un precedente que pueda ayudar a prevenir futuros actos de crueldad animal.