Carro chocado causa volcadura

Colisionó sedán con talud de la sierra; tráiler, por evadirlo, acabó siniestrado también
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Un automóvil familiar sufrió un accidente carretero en la Rumbo Nuevo y cuando esperaban la llegada de los cuerpos de auxilio pasó un tráiler que por evadir el coche acabó volcado en medio del camino.



El percance doble ocurrió a las 16:00 horas en el kilómetro diez del referido camino interestatal, acudiendo al lugar los cuerpos de emergencias para atender a los involucrados en este percance.







Según las indagatorias levantadas en el lugar, todo comenzó cuando una familia viajaba a bordo de un Chevrolet Aveo con dirección al sur del estado por la Rumbo Nuevo, sin embargo, el conductor del coche tomó mal una curva y colisionó con el talud de la sierra.



Todos los tripulantes del coche resultaron ilesos y abandonaron la unidad para situarse a un lado del camino y solicitar auxilio.



Mientras esperaban, pasó un tráiler Kenworth que remolcaba dos pipas de 35 y 36 mil litros, cargadas de aceite industrial. Esta pesada unidad era conducida por Rigoberto Márquez Calletano, de 33 años, originario de Salamanca, Guanajuato, con destino a Altamira.







El camionero avistó el coche accidentado y maniobró para no llevárselo de corbata, pero en el acto perdió el control del volante y el peso de sus remolques le venció, derribando el tráiler sobre su costado y desparramando el aceite que transportaba sobre el camino.



Afortunadamente, el trailero resultó ileso de este incidente y al igual que la familia se situó a un lado del camino para esperar la llegada de socorristas.



Debido a que los restos de las pipas y el tráiler obstaculizaban el camino, así como el peligro que representa la presencia del aceite industrial sobre la carpeta asfáltica, las autoridades decidieron cerrar la vialidad por espacio de varias horas.



Para remover el coche familiar bastó con una grúa particular, pero hicieron falta complicadas maniobras y maquinaria especializada para retirar los remolques y el tráiler destrozado, así como un lavado químico para el asfalto, antes de volver a abrir la circulación de la Rumbo Nuevo.