Asesinaron a Norberto por 500 mil pesos y unas alhajas
Eran las 9:32 de la noche, Norberto Ronquillo, estudiante de Mercadotecnia Internacional en la Universidad del Pedregal, salió de la escuela, en la alcaldía Tlalpan.
Cámaras de seguridad grabaron cuando el universitario salió de la escuela y envió un mensaje de texto a su novia.
Los tíos del estudiante, quien era originario de Chihuahua, recibieron una llamada, eran unos secuestradores.
En la primera llamada el tío de Norberto no escuchó bien y la cortó, después le volvieron a marcar y comenzaron a insultarlo por haberles cortado la comunicación, se asustó y les volvió a colgar.
Al no ceder, optaron por llamarle a la tía del joven, a quien también insultaron y le pidieron 5 millones de pesos.
Las primeras horas del 5 de junio, parte de los familiares acudieron a la Fuerza Antisecuestro para reportar el plagio.
Sin embargo, en la casa, la tía de Norberto continuaba negociando con los secuestrados bajar la cantidad de dinero.
La tía de Norberto logra convencer a los maleantes y acuerda darles 500 mil pesos, así como unas alhajas.
Al llegar a un acuerdo, la tía del estudiante llama a su esposo y su hijo, quienes en ese momento estaban en la Fuerza Antisecuestro. En ese momento pide a las autoridades que no intervengan.
Más tarde, Oswaldo, el primo de Norberto es quien termina haciendo las últimas llamadas para ponerse de acuerdo con los secuestradores a fin de entregarles el dinero.
Le piden que vaya a un autolavado, se estacione ahí, que baje del vehículo, cruce la calle, se dirija a un terreno que está enfrente de dicho establecimiento y que lance por encima de la reja la bolsa con el dinero y las joyas.
Posteriormente le dicen que se dirija a Canal de Chalco, que ahí van a liberar a su primo; Oswaldo, llega alrededor de las 3:30 de la madrugada a dicho lugar, sin embargo, Norberto nunca apareció.
Después de entregarles el dinero los secuestradores no volvieron a comunicarse con ellos.
La tarde del domingo 9 de junio, el cuerpo de Norberto fue encontrado envuelto en una cobija de color gris, dentro de una bolsa negra de plástico, en color negro, a un costado de un camino de terracería en Xochimilco.