Concluye otra semana sin que MORENA pueda definir a su candidato a la gubernatura de Tamaulipas, lo que se traduce en más ataques y divisiones al interior del movimiento.
La pugna más visible se dio en el Congreso local, donde Adrián Oseguera jugó en contra de su partido y descarriló la agenda legislativa para perseguir sus intereses personales.
¿Por qué juega Oseguera en contra de MORENA? Porque se ve con pocas posibilidades de conseguir la candidatura.
Así que el alcalde de Madero busca ganar mayor influencia en la toma de decisiones de su partido por medio de la fuerza y la rebeldía.
Y francamente lo está logrando, Oseguera le ha ganado la partida a Zertuche en el control del grupo parlamentario, el cual está paralizado y a la espera de las próximas órdenes del alcalde de Madero.
¿Qué pasará entonces cuando Oseguera no sea nombrado candidato? ¿También jugará en contra de MORENA? ¿Perseguirá sus intereses personales? ¿Apoyará a otro partido?
Oseguera ya intentó hacerse del control de los legisladores de MORENA cuando quizo madrugar para imponer coordinador parlamentario. Entonces tuvo que ser el propio dirigente nacional Mario Delgado quien viniera a enmendar la plana.
Quien avisa no es traidor dice el refrán popular, y Adrián Oseguera ya avisó dos veces. ¿La tercera será la vencida?
Además del pleito en el Congreso, los aspirantes morenistas también aumentaron el fuego amigo con acusaciones y señalamientos entre sí, los cuales nacen del nerviosismo y de lo incierto del proceso, pues nada se ha informado de las famosas encuestas para la selección del candidato.
Tal parece que la figura del Primer Morenista del Estado sí es necesaria después de todo, y es que la disciplina política es difícil de manejar a control remoto y desde la Ciudad de México.
Sin un líder local que sea capaz conciliar diferencias y llamar al orden cuando sea necesario, MORENA en Tamaulipas seguirá siendo secuestrada por intereses particulares, como ya lo demostró Oseguera.
El cálculo de la dirigencia nacional es que el candidato a la gubernatura se convertirá en ese Primer Morenista de Tamaulipas, pero eso no se decide, se construye, y es fecha que no se ha puesto la primera piedra.
El otro lado de la moneda lo demostró ayer ‘El Truco’ Verástegui.
Porque ‘El Truco’ no solo está construyendo su candidatura, está construyendo su liderazgo.
De eso se trató la declinación de Gerardo Peña en favor de Verástegui. Su importancia no se mide en los votos que pueda sumar o restar el reynosense, sino en el reconocimiento del liderazgo que tiene ‘El Truco’ dentro del PAN.
Liderazgo que sirve entre otras cosas para facilitar la toma de decisiones, primero dentro de Acción Nacional y después dentro de la alianza de partidos que buscan llegar juntos en la boleta.
Por eso ‘El Truco’ tiene asegurada la candidatura de la Alianza, no solo por el apoyo que tiene del gobernador, sino porque ha sabido hacer su trabajo.
Eso no se lo pueden discutir ni ‘Chucho’ Nader ni el resto de los aspirantes alianzistas que han levantado la mano.
Así que mientras en MORENA se pelean, y mientras en el PRI se pelean, César Verástegui se sigue afianzando.
La definición del candidato morenista servirá para poner muchas cosas en su justa dimensión, sin embargo entre más se tarde en llegar la designación, peor será el punto de partida para el Movimiento de Regeneración Nacional en la carrera por la gubernatura.
Pues eso.
Es bueno saberlo: 1) La Unidad de Inteligencia Financiera de Pablo Gómez ha puesto en la mira al reynosense Juan Armando Hinojosa, fundador del Grupo Higa y constructor favorito en el sexenio de Peña Nieto.
El tamaulipeco, quien vendió por 7 millones de dólares la ‘Casa Blanca’ de la Gaviota, es investigado por sus sociedades offshore que fueron documentadas en la investigación de los Panama Papers en 2016 y recientemente en los Pandora Papers de este año.