El delegado del CEN de Morena en Tamaulipas acusó a las autoridades estatales de acosar a los candidatos de su movimiento.
“Eso que están haciendo es simple y sencillamente inaudito en un estado como Tamaulipas, donde las instituciones de justicia están empeñadas en interferir en un proceso electoral” aseguró.
Luis Ernesto Palacio remató señalando que estos hechos afectan la credibilidad del proceso electoral y dañan a las instituciones del estado.
El morenista tal parece que sufre de amnesia selectiva o de plano cree que los tamaulipecos somos como los chilangos y nos creemos cualquier cosa.
Porque de eso se trata precisamente el proceso de desafuero en contra del Gobernador de Tamaulipas, una persecución política de las autoridades federales en contra sus opositores para interferir en el actual proceso electoral.
Y tal como dice Palacio, esto lo único que ha provocado es que la Unidad de Inteligencia Financiera pierda su credibilidad, al haberse convertido en el brazo acosador de los opositores presidenciales en plenas campañas.
Con estas declaraciones el delegado no solo escupe para arriba, sino que además demuestra la desesperación en la que ha caído su partido después de que su principal estrategia electoral, el proceso de desafuero, no saliera de acuerdo a sus planes.
Culpar al contrario es el camino fácil, lo difícil para el delegado y para Morena es analizar el perfil de sus actuales candidatos y reconocer que se han equivocado con su postulación.
En lugar de estas declaraciones estridentes que solo sirven para desacreditar a su partido, lo primero que debería hacer Palacio es pedirles a sus candidatos que rindan cuentas con la justicia y prueben su inocencia.
Pero no, en vez de eso ataca a las instituciones de impartición de justicia como si estas fuera las culpables de que sus candidatos vayan abajo en las preferencias.
Si el PAN no se vio afectado electoralmente fue precisamente porque el Gobernador Cabeza de Vaca ha salido al paso de cada una de las acusaciones en su contra y las ha refutado con pruebas, ojo, y no con ruedas de prensa como lo intenta el delegado.
Por eso en su gira de este fin de semana por Tamaulipas, Marko Cortés, el dirigente nacional del PAN, le demostró su respaldo al Gobernador en contra de la “persecución política que sufre el mandatario tamaulipeco”.
"Vengo a respaldar al gobernador porque es clara una persecución política evidente en tiempo electoral, porque no es correcto lo que está haciendo el gobierno federal, el buen juez por su casa empieza, por eso hemos presentado el día de ayer una denuncia en la Fiscalía General de la República contra Ebrard y contra Sheinbaum y estamos pidiendo que también se proceda al desafuero, para ver si es cierto que somos iguales en todos lados, porque ahí se perdieron vidas humanas, inocentes y porque hay señalamientos claros de corrupción que nunca aclararon” declaró.
"Está claro que el Gobierno Federal no toca igual a todos, a los adversarios, les avienta todo el peso de la ley, a los adversarios los difama, les inventa y a los suyos ante lo evidente, ante lo que es público y notorio los protege, eso es inaceptable” insistió Cortés.
Así es, con el proceso de desafuero contra un mandatario estatal, MORENA ha abierto una caja de Pandora que no solo puede afectar a los gobernadores oficialistas sino también al propio presidente.
Por eso AMLO salió a deslindarse en su mañanera del pasado miércoles del proceso de desafuero, al asegurar que él no tiene nada que ver con el asunto.
Ya conoce el dicho: la derrota es huérfana pero la victoria tiene muchos padres.
La cuenta regresiva sigue corriendo, ya solo quedan 24 días para que finalicen las campañas, poco más de tres semanas en donde las tendencias en la intención de voto favorecen a los candidatos panistas sobre los morenistas.
En este contexto se debe entender la desesperación de su delegado y sus candidatos, por eso inventan encuestas y recurren a la guerra sucia.
Por eso AMLO hace campaña desde sus mañaneras. Lo que no entiende el Presidente es que lejos de ayudarlos, está afectando más a sus candidatos.
Pues eso.