Monreal hace equipo con ex priistas

Un fracaso resultó la intentona de Ricardo Monreal de hacerse con el control de Morena Tamaulipas y de entregar las candidaturas a las diputaciones locales de su partido a los conversos ex priistas que participaron en el evento de unidad el pasado sábado. 

 

Su enviado, Alejandro Rojas (también ex priista, por cierto), no tuvo más remedio que meter reversa ante las protestas y señalamientos en contra de los “cascajos priistas” y solicitar la creación de una comisión para estudiar las designaciones. 

 

Una burda estrategia para ganar tiempo e imponer sus intereses y candidatos desde el centro del país. 

 

Tal parece que ser el vicecoordinador de la segunda circunscripción electoral de Morena le da tal prerrogativa al operador de Monreal. 

 

Lo cierto es que las inconformidades de los militantes dejaron en claro la profunda división que sufre el partido del Presidente López Obrador en Tamaulipas. 

 

Porque si había alguna duda, basta con revisar la asistencia del encuentro. Había más ex priistas que funcionarios de Morena, y conste que era fin de semana. 

 

No estuvieron el Senador Américo Villareal ni el delegado José Ramón Gómez Leal, dos de las figuras con el mayor liderazgo de Morena en el estado. 

 

Quienes sí estuvieron en cambio, fueron personajes como Oscar Luebbert, Jaime Rodríguez Inurrigarro, José Guadalupe Herrera Bustamante, Eliseo Castillo y Ricardo Rodríguez. Todos ex priistas con lazos cercanos a los ex gobernadores tricolores de Tamaulipas caídos en desgracia y perseguidos por la justicia. 

 

Así como una ristra de ex dirigentes municipales tricolores sin oficio ni beneficio. 

 

Este no es el primer intento de Ricardo Monreal de inmiscuirse en la vida política de otra entidad utilizando su cargo como coordinador de Morena en el Senado.

 

Apenas la semana pasada Monreal le soltó un “Que Dios la ayude” a la dirigente nacional de su partido, Yeidckol Polevnsky, cuando esta calificó de “necedad” que desde el Senado, Monreal impulsara a Alejandro Armenta como candidato de Morena a la gubernatura de Puebla, en sustitución de Miguel Barbosa. 

 

La estridencia de Monreal es un sello conocido del zacatecano. Sus videos durante la campaña de López Obrador, dirigidos a Tamaulipas, estuvieron cargados de señalamientos y acusaciones que nunca se molestó en probar. 

 

Hoy su enviado, Alejandro Rosas, de nueva cuenta hace uso de la misma estrategia, lanzado una serie de amenazas y acusaciones contra las autoridades tamaulipecas, a las que señala de todo, pero otra vez sin presentar prueba alguna.

 

Qué interés tiene Monreal en tener políticos afines en altos cargos de elección regados por el país, la respuesta es muy simple; Monreal quiere ser Presidente, y para eso necesita el apoyo político y sobre todo económico de una buena cantidad de gobernadores. 

 

Por eso el coordinador del Grupo Parlamentario de Morena en el Senado meterá su cuchara en donde lo dejen, y no tendrá empacho en utilizar ex priistas, ex perredistas, ex panistas y a los propios morenos para garantizar su lealtad ante una posible candidatura del zacatecano dentro de seis años. 

 

El asunto es que aquí en Tamaulipas, cuando menos, la estrategia de utilizar ex priistas como candidatos ya probó ser contraproducente para Morena. 

 

Así lo demuestran los resultados fallidos del partido de AMLO en las pasadas elecciones locales. 

 

Por eso bien harían Monreal y Rosas en escuchar primero a las bases de Morena y sacar en unidad a sus candidatos, alejarse de las imposiciones y sobre todo evitar que ex priistas de oscuro pasado y mala reputación se sumen a su partido y hasta sean premiados como candidatos. 

 

Monreal ya perdió una vez en nuestro estado y parece que busca repetir. Haría bien en aprender la lección. 

 

Pues eso. 

 

 

Es bueno saberlo: 1) Los rumores en redes sociales han desatado el pánico en lugares como la Ciudad de México, Nuevo León y ahora en Tamaulipas. 

 

Aprovechando la desinformación y el miedo de la gente, intereses perversos utilizan las mentiras de las redes sociales para lograr sus objetivos. 

 

La CDMX es gobernada por Morena, Nuevo León por un independiente y Tamaulipas por el PAN. 

 

¿Quién tendrá intereses en contra de todos ellos?

 

2) El Rector de la UAT, José Andrés Suárez Fernández, entregó los dos vehículos que se ofrecieron como premio a los trabajadores sindicalizados de la máxima casa de estudios.

 

El maestro Humberto Rangel, profesor de Derecho en Tampico y Hércules Santiago, empleado administrativo en Matamoros, fueron los ganadores de un automóvil Dodge Attitude.  

 

En su mensaje, el Rector subrayó el compromiso de su administración con los trabajadores y docentes de la Universidad.