Cabeza de Vaca se abalanzó como zopilote sobre los restos de las víctimas de los recientes hechos en Matamoros.
El ex gobernador, fiel a su modus operandi, quiso aprovecharse de la desgracia ajena para usarla como trampolín y volver a la política nacional, haciéndolo desde la comodidad y distancia que le permite su doble nacionalidad.
A los tamaulipecos ya no nos sorprende su falta de escrúpulos, pero lo que sí nos sorprende es la urgencia y desesperación con que lo hace.
Porque intentar aprovechar una coyuntura de esta naturaleza deja muy claro que Cabeza de Vaca carece de argumentos propios luego de gobernar por seis años a Tamaulipas y dejarlo en la ruina.
Se ha puesto a pensar como el ex gobernador se indignó más por la muerte de 2 ciudadanos americanos, que por lo miles de tamaulipecos que murieron durante su administración.
Porque en el gobierno de Cabeza de Vaca no solo murieron presuntos delincuentes, policías y miembros de las fuerzas armadas en cumplimiento de su deber, también murieron hombres, mujeres y niños inocentes, tamaulipecos, migrantes nacionales y centroamericanos.
Pero para ellos no hubo videos, ni justicia de parte del ex gobernador panista.
Cabeza de Vaca no acabó con la inseguridad en Tamaulipas, lo que hizo fue administrarla, al grado de utilizar la ley como una herramienta política contra sus adversarios.
Políticos de todos los partidos dan fe de ello.
Sin embargo, el circo mediático que intentó montar ahora Cabeza de Vaca pasó desapercibido.
Salvo por los bots azules en las redes sociales y sus usuales cajas de resonancia mediática, la presencia de Cabeza de Vaca no trascendió ni en Tamaulipas ni en el resto del país.
Hay varias razones, pero hablemos de tres de ellas.
La primera es que Cabeza de Vaca, tal como lo hizo en la elección de 2022, intenta posicionar a la inseguridad como la principal preocupación de los votantes.
Y si bien el tema es importante, lo que Cabeza sigue sin entender es que para los mexicanos antes de la seguridad está la corrupción y la desigualdad económica que se vive en el país, y por la que se culpa a los políticos que como él, gobernaron y no hicieron nada contra este problema.
La segunda razón del porque Cabeza de Vaca pasó desapercibido en el escenario nacional, es que la propia oposición, entiéndase PAN y PRI, no les interesa que Cabeza regrese de su autoexilio y mucho menos sea el abanderado de la Coalición.
Para ‘Alito’ y para Marko Cortés, Cabeza de Vaca es un distractor para entretener a Adán Augusto y a la propia Fiscalía General de la República.
El tamaulipeco es un fusible listo para ser sustituido en cuanto cumpla su vida política útil, y por lo visto la fecha ya se está llegando.
Las élites políticas y empresariales del país saben que clase de persona y de gobernante es Cabeza de Vaca, y no quieren tener nada que ver con él.
La tercer razón de su intrascendencia es que Cabeza intenta convencer a los votantes nacionales de algo que no pudo hacer con los votantes tamaulipecos.
Y lo intenta porque cree que es más fácil engañar al resto del país que no lo ha padecido, en lugar de convencer a los tamaulipecos que ya lo conocen.
Otra estrategia que ya utilizó con antelación y que resultó claramente equivocada.
Cabeza pretende ser candil de la calle y oscuridad en su casa. Por eso se siente más cómodo en entrevistas de medios nacionales, pero rehuye a ser cuestionado por los tamaulipecos.
La experiencia nos dice que Cabeza no corrige, ni tampoco aprende de sus errores, al contrario, apuesta doble incluso después de la derrota.
Es la miopía de quienes se ciegan con el poder, pues esperan que sea el mundo quien se adapte a sus circunstancias y deseos, por muy absurdos que estos sean.
Pues eso.
Es bueno saberlo.- 1) Docentes y estudiantes de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), comprometidos con el medioambiente, participan en el proyecto “Compostaje comunitario de residuos orgánicos en la Unidad Académica Multidisciplinaria de Ciencias, Educación y Humanidades (UAMCEH)", el cual implementa un sistema para el tratamiento y aprovechamiento de los residuos orgánicos.
El proyecto, impulsado por la Red Universitaria para la Sustentabilidad, es desarrollado por estudiantes de la Licenciatura en Ciencias de la Educación, en coordinación con sus docentes, la Dra. Sylvia Ávila Rodríguez y el Mtro. Luis Alberto Portales Zúñiga, a fin de promover soluciones en las que la comunidad universitaria pueda aportar acciones para un futuro sostenible.
El proyecto planteó, en una primera etapa, darle un tratamiento a la mayoría de los restos orgánicos de la cafetería “Alces", del comedor universitario y de los residuos generados por los jardines y áreas verdes de la unidad académica.
Los residuos son tratados de manera controlada como alternativa de producción limpia y sostenible, evitando la contaminación en ambientes escolares y transformando los residuos en composta para darles un valor agregado.
El humus obtenido es de gran utilidad para el agregado de materia orgánica al sustrato del huerto escolar, en el cual se cosechan vegetales como: acelga, repollo, cilantro, tomate, calabaza, papaya, nopal, zanahoria y sandía.
En una segunda etapa, personal de la Dirección de Sustentabilidad de la Secretaría de Investigación y Posgrado, así como docentes y estudiantes de la UAMCEH, con el apoyo de la Dirección del plantel, pusieron en marcha la creación de jardines de plantas medicinales y aromáticas, utilizando tierra de esa composta, aprovechando así los beneficios prácticos de diversas especies vegetales, sus fines curativos, sus propiedades culinarias y su gran belleza ornamental.
A través de esas acciones, la UAT da cumplimiento a su compromiso, estipulado en el Plan de Desarrollo Institucional 2022-2025, por ser un espacio vivo y dinámico de aprendizaje en el que se impulse una cultura de sostenibilidad y gestión ambiental, mediante estrategias de mejora continua orientadas en la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible.