El Presidente López Obrador fue muy claro en su visita a Victoria cuando se le preguntó por Eugenio Hernández y su candidatura al Senado: “ojalá y no haya retrocesos en Tamaulipas”. 

AMLO tuvo que limitar su respuesta por la veda electoral pero no hizo falta más, su declaración fue clara y contundente. 

Y es que Geño está haciendo campaña en contra de MORENA en Tamaulipas y en contra de la Cuarta Transformación que encabeza el Presidente López Obrador. 

El mitin en Matamoros, donde participaron Maki y Mario López Hernández junto con a Hernández Flores no deja lugar a dudas.

Pero si necesitaba más pruebas de que Geño está en contra de MORENA, la reunión “entre amigos” que hizo con los adultos mayores del tricolor, despeja cualquier suposición. 

Geño pretendió mostrar músculo con los veteranos priistas que asistieron a la reunión, sin embargo ninguno de ello se mantiene activo en la política ni en su partido. 

Peor aún, todos ellos dejaron de ganar elecciones desde que el PRI-Estado dejó de gobernar. 

Los videos que pusieron a circular del evento dan fe de ello; Geño flanqueado por Baltazar Hinojosa y Lupita Flores. El primer priista tamaulipeco que perdió una gubernatura y la maestra que perdió su última elección al Senado y le abrió el paso a Cabeza de Vaca. 

Luego de estar 6 años en prisión, tener una orden de extradición al ser requerido por las autoridades de Estados Unidos, y dejar a Tamaulipas chorreando de sangre, repleto de corrupción y en quiebra financiera luego de su paso por la gubernatura, Eugenio Hernández no cuenta con capital político propio para ganar una elección. 

Por eso se tiene que colgarse de MORENA mientras le da puñaladas por la espalda. Por eso tiene que recurrir a los cartuchos quemados en busca de votos, porque la juventud ni lo topa. 

Lo peor de todo es que Geño, al igual que Cabeza, buscan ganar votos en esta elección peleando el argumento de quién ha sido el peor de los dos. 

Ridículo, porque esa comparación es como pedirle a los tamaulipecos que elijan entre dos pilas de basura. 

Los tamaulipecos ya hemos padecido a ambos gobiernos. AMLO les dice la mafia del poder, otros les dicen el PRIAN, lo cierto es que tanto Geño como Cabeza son el mejor ejemplo de lo peor de cada partido. 

Por cierto, Cabeza de Vaca está a un paso de perder su candidatura, luego de que MORENA impugnara ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación su nominación plurinominal a la Cámara de Diputados, al señalar que no reúne los requisitos de elegibilidad. 

Y es que el ex gobernador tiene doble nacionalidad, es prófugo de la justicia con 11 procesos penales abiertos y una orden de aprehensión, y no tiene forma de comprobar su residencia en Tamaulipas 6 meses antes de la elección, así que con un solo argumento que acepte el TEPJF, su garantía de fuero gratis se vendría abajo. 

Por eso anda tan preocupado Cabeza de Vaca y por eso sus candidatos panistas no están haciendo campaña, pues no hay forma de que ganen votos.

Mucho menos con las ‘ayudaditas’ de su candidata presidencia, que anunció el cierre de la ‘refinería de Tampico’ en caso de ganar la elección. 

Cabeza de Vaca y Eugenio Hernández son el pasado al que los tamaulipecos no quieren regresar.

Por eso MORENA gobierna hoy en Tamaulipas, porque los tamaulipecos se cansaron de la corrupción y la impunidad de sus ex gobernadores. 

De eso, precisamente, trata la transformación.

Pues eso.