El Doctor Américo Villarreal Anaya es el aspirante de MORENA mejor posicionado en las encuestas para ser el candidato de su partido a la gubernatura.
Lo ha sido desde que ganó la elección al Senado en 2018, y a la fecha ningún otro morenista se le acerca.
Su eslogan de campaña ha sabido capturar en una frase sus mayores virtudes, porque ‘Una historia que nos une’ no solo hace referencia a su larga trayectoria al servicio de los demás, primero como médico y después como servidor público, sino que también hace referencia al legado de su padre, el Ingeniero Américo Villarreal Guerra.
Legado que también recuerda el propio Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Por eso será muy difícil que sea otro el candidato o la candidata de MORENA.
Y es precisamente esa, la cuestión de género, la única forma en que el Senador Villarreal Anaya pueda quedar fuera.
Sin embargo, salvo una sorpresa de última hora el asunto ya está decidido, en Tamaulipas MORENA tendrá candidato.
Por eso Bertha Luján, Presidenta del Consejo Nacional, está apurada para meter en las encuestas a Adrián Oseguera.
Pero no importa a quién más agreguen, las mediciones (las profesionales) han sido claras una y otra vez, y el victorense está arriba en todas.
También hay que ser realistas, las encuestas le han servido al partido como un mecanismo para despresurizar el proceso, porque finalmente el único voto que importa es el de Andrés Manuel López Obrador.
Por supuesto que las preferencias de la gente ayudan a tomar la decisión, pero ayuda más el apoyo del Presidente.
Es por esto que la candidatura del Senador Américo Villarreal parece inevitable, pues cumple con los dos requisitos más importantes: lo quiere el pueblo y lo quiere AMLO.
Maki Ortiz, quien hasta hace algunos meses era panista y se negaba a usar el chaleco marrón y a posar con la señal de la Cuarta Transformación, es quien aparece en un lejano segundo lugar.
Eso no solo deja mal parados a los aspirantes como Rodolfo González Valderrama, José Ramón Gómez Leal, Hector Garza ‘El Guazón’, el propio Oseguera y hasta Erasmo González, quienes tienen más tiempo en MORENA pero son un cero a la izquierda en Tamaulipas.
Sino que además facilita la elección de AMLO en favor de Américo.
López Obrador lo ha dicho en varias ocasiones, él valora la lealtad sobre todas las cosas, y Américo Villareal ha sido el tamaulipeco más leal. Su trabajo en el Senado es la mejor prueba.
Además, AMLO ya ha comprobado que su mejor apuesta son los candidatos fieles al movimiento, porque los externos crean más problemas. Ahí está el caso de Zacatecas con los Monreal.
López Obrador concedió la candidatura a David Monreal, hermano de Ricardo, para garantizar la lealtad del Senador zacatecano a su proyecto de nación.
Pero Ricardo Monreal no solo lo traicionó en las elecciones intermedias de la Ciudad de México, sino que además se hizo de una gubernatura desde donde obtendrá recursos para sus aspiraciones presidenciales.
La lección ya está aprendida. AMLO no se la va jugar con una ex calderonista, no solo por su falta de lealtad, sino porque no cree en el proyecto de la Cuarta Transformación.
Hacerlo sería tener a otra gubernatura en su contra, algo que no se puede permitir de cara al 2024.
El anuncio de la designación del candidato de MORENA en Tamaulipas, al igual que en los otros cinco estados donde habrá elecciones, se espera en los primeros días de diciembre, por lo que las vacaciones invernales le servirán a Américo para fortalecer la unidad entre los aspirantes despechados.
Esa será la verdadera precampaña.
Pues eso.
Es bueno saberlo: 1) Centenares de jinetes acompañaron al ‘Truco’ Verástegui en su cabalgata por Padilla.
La asociación Todos por Tamaulipas sigue demostrando músculo en las diferentes regiones del estado.
Gran diferencia si se compara con las reuniones de 50 personas que organiza ‘Chucho’ Nader en la zona conurbada, como ocurrió este fin de semana en Altamira.
Lo de Nader ya no es terquedad, es rebeldía.