El alcalde de Victoria, doctor de profesión, desahució muy rápido al paciente que está bajo su cuidado.
“Ante la enfermedad COVD-19, estamos enfrentando juntos el mayor reto social. Mañana no estaremos algunos de nosotros. Mañana no estarán algunos de nuestros seres queridos” fueron las primeras palabras del mensaje que dirigió Xico el pasado viernes 27 de marzo.
De apenas 56 segundo de duración, la grabación publicada en su cuenta de Facebook retrata la ineptitud e ignorancia de quien gobierna la capital del estado.
Lejos de inspirar tranquilidad y confianza en su gobierno, el tono lúgubre y alarmista de Xico causó más pánico y confusión entre la población.
Y ya frente a la cámara, el alcalde quiso aprovechar la ocasión para atender todas las crisis que padece Victoria en menos de 60 segundos.
Porque sin ninguna explicación de por medio, González Uresti ofreció su celular: 834-127-387, para que los ciudadanos que no tuvieran agua le marcaran, prometiendo que los atendería a todos.
Algo que rápidamente desmintieron los victorenses, pues en los comentarios del video publicaron sus grabaciones donde el alcalde nunca les respondió, apenas unos minutos después de haber subido la grabación original.
Para finalizar el video, Xico reconoció la grave crisis económica y social en la que ha sumido su gobierno a Victoria, su solución: entregar 10 mil despensas de alimentos básicos.
De nuevo fueron los propios ciudadanos quienes interpelaron al alcalde: no somos muertos de hambre, queremos el agua que pagamos no las despensas.
De nuevo no hubo respuesta.
Al final del video Xico lanzó un parco “Quédate en casa”. El daño estaba hecho.
La incapacidad e ignorancia que ha demostrado Xicoténcatl González ante las necesidades más elementales de los victorenses está más que comprobada.
Por eso, ante un reto mayúsculo como la pandemia de coronavirus que ya registra un caso en VIctoria poco se podía esperar de nuestras autoridades municipales.
Pero tal parece que nuevamente se han superado.
Porque eso fue el viernes.
Pero el sábado, el alcalde salió a jugar a policías y ladrones. Se trepó en la caja de una patrulla de la Policía Estatal, se disfrazó con unos guantes y un tapabocas, y salió a recorrer la ciudad para invitar a los victorenses a regresar a sus casas.
Un gesto errado y tardío, si se toma en cuenta que desde la semana pasada el gobierno del estado se ha encargado de hacer conciencia con el mensaje #QuédateEnCasa.
Incluso los propios elementos de Tránsito y de la Guardia Nacional se desplegaron en espacios públicos concurridos para hacer conciencia.
Pero lo de Xico solo era para las cámaras, las propias. Que de nuevo fallaron en su propósito porque al retratarlo encima de la patrulla y con la cara cubierta, lo que proyectaron fue a un bandido a caballo o a un terrateniente despreciando a sus gobernados, no un político capaz y mucho menos cercano a la gente.
La cereza del pastel ocurrió ayer domingo, cuando Gustavo Rivera, el ex gerente de COMAPA Victoria en el gobierno de Oscar Almaraz, anunció que se integraba a las tareas de campo bajo la gerencia de Román Castillo.
Gustavo Rivera, el responsable del saqueo en el que encontraron a la COMAPA, el primer culpable al que invocan cuando utilizan el discurso de culpar al pasado y limpiarse de toda responsabilidad.
Más claro, imposible.
Xico, al igual que AMLO, ha quedado rebasado en sus responsabilidades, y ha sido el gobierno del estado y la propia ciudadanía quienes han hecho su trabajo para sacar adelante a Victoria.
Ahora, si Xico no tiene la menor idea de lo que se debe de hacer, no hace falta que traiga a los mapaches priistas del pasado, basta que voltee la vista hacia arriba.
Porque mientras Xico aumento el costo del servicio de agua potable, negó la condonación de adeudos y urgió a los usuarios a pagar puntualmente el aire que reciben de las tuberías, el Senador Ismael García Cabeza de Vaca propuso en el pleno del Senado que la Comisión Federal de Electricidad solicitó la suspensión del cobro del servicio de energía ¡por tres meses! Para hacer frente a la actual contingencia sanitaria.
Pero si el alcalde de Victoria en verdad quiere infundir tranquilidad entre sus gobernados, lo más sensato que puede hacer es informar de su estado de salud, físico y mental, ante los rumores de contagio del virus COVID-19 en su familia.
Dos gobernadores y cuando menos tres diputados federales ya han informado que han sido contagiados. Ningún alcalde o servidor público está exento de ello.
Y mientras tanto, lo más sensato que puede hacer usted como ciudadano es ignorar a un alcalde como Xico y atender las recomendaciones de las autoridades estatales, quienes a diferencia de las autoridades municipales, ya nos han demostrado su competencia.
Pues eso.