QUÉ NECESIDAD

Para mi nieta Adri, por sus 9 años.

"Pero qué necesidad, para qué tanto problema", como dice la canción de Juan Gabriel, le preguntamos a Andrés Manuel López Obrador en cuanto a su enojo desproporcionado por el asunto de la "Casa Gris". El mandatario reaccionó con tal virulencia contra la prensa, que se hubiera dicho que era verdad el conflicto de interés de su hijo mayor y su nuera al rentar la residencia de Texas, cuando aún no se había confirmado que aparentemente jamás existió corrupción. Como dice Raymundo Riva Palacio: "El Presidente endureció su discurso para deslegitimar cualquier crítica e investigación periodística, y en la otra trinchera elevaron el tono de la confrontación, desafiando no solo a López Obrador, sino a la investidura presidencial. Es cierto que el primero la degradó, pero los segundos la han mancillado". Ahora que supuestamente ya está todo aclarado en relación a un posible conflicto de intereses, confieso que también yo aproveché el linchamiento contra el Presidente, porque lo vi tan vulnerable y falto de argumentos, que no pude evitar mi rabia contra su discurso obsesivo y agresivo de combatir la corrupción cuando en apariencia su hijo había caído en lo mismo que los juniors de antes. Confieso que estaba muy indignada y que pasaba constantemente por mi cabeza la tan manida frase: "no somos iguales". Lo que realmente me causó un verdadero disgusto fue su andanada de ataques contra la prensa, con excepción de La Jornada.

¿Qué fue lo que realmente sacó de quicio al Presidente con el escándalo de la "Casa Gris"? Tal vez pensó que su hijo José Ramón pudo haber caído redondito en una trampa, o bien en un caso de descarado influyentismo sin pensar en las consecuencias. Quizá lo que lo molestó hasta la médula fueron los memes, las caricaturas y el hecho de que estuviera en la boca de todo el mundo, incluso en el extranjero. ¿Por qué López Obrador no se molestó de la misma forma cuando se dio a conocer el reportaje de la fábrica de chocolates "Rocío", de su segundo hijo, Andy, la cual por cierto ha tenido éxito rotundo? Su socio es el empresario y exportador de cacao Hugo Chávez Ayala.

Es cierto que nunca como ahora había existido tanta polarización en la sociedad mexicana. ¿Quién fue el primero que la causó (fifís contra chairos) y quien la sigue promoviendo y explotando para sus propios intereses? Andrés Manuel López Obrador. Seguramente la estrategia de AMLO, a costa de lo que sea, es divide y vencerás. Sin embargo, en el caso de los ataques contra la prensa, no dividió, lo que logró fue unir al Cuarto Poder prácticamente en un solo bloque, con excepción de algunos medios como los chayoteros de La Jornada. Qué tan graves han de ser estos ataques en un ambiente de asesinatos de periodistas. "El alto número de periodistas asesinados en México este año y las continuas amenazas que enfrentan son preocupantes. Me uno a quienes piden protección a los periodistas mexicanos. Mi corazón está con los parientes de quienes han dado sus vidas en la búsqueda de la verdad", escribió el 22 de febrero en un tuit Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos. Rara vez, López Obrador ha expresado en las redes sociales el pésame a los familiares de los periodistas asesinados, por eso, los profesionales de la información que asistieron a su mañanera el 16 de febrero se negaron a hacerle preguntas y al día siguiente, en Tijuana, una periodista habló a nombre del gremio en su estado: "Trabajamos bajo la sombra de ser atacados y asesinados por nuestro trabajo y los crímenes que se cometen en nuestra contra no se aclaran (...) no dejaremos de exigir justicia".