1.-Le quedó el saco. El Presidente López Obrador no se equivoca cuando dice que los ataques al Gobierno de Tamaulipas son una ‘lanzada’ política que obedece a intereses particulares.
AMLO no le puso nombre a esos intereses, pero el sacó le debió de quedar muy justo a Cabeza de Vaca porque este respondió al señalamiento horas más tarde, mediante sus redes sociales.
Y lo tiene que hacer de esta forma porque el ex gobernador está auto exiliado en Estados Unidos, a donde huyó por miedo a enfrentar la justicia y los reclamos de la gente, luego de su desastroso paso por la gubernatura.
Cabeza de Vaca está acostumbrado a sembrar el pánico y propagar la desinformación entre los tamaulipecos porque así es más fácil ocultar su fracaso.
Lo hizo como gobernante y lo hace ahora también como oposición.
Cabeza necesita a un Tamaulipas dividido porque esa es la única forma en la que podrá regresar en el 2024 como candidato.
No necesita ganar, solamente competir, pues habrá muchos cargos plurinominales. Pero de aquí a allá tiene que mantenerse vigente, al menos para ser tomado en cuenta por su partido.
Por eso, como ave carroñera, Cabeza se convierte en el más beneficiado cuando se habla de hechos de sangre en Tamaulipas, no importa que estos sean ficticios o exagerados. Se trata de desinformar, de sembrar el pánico y la división, utilizando a los tamaulipecos como rehenes.
2.-Pactos entre corruptos. Hablando de panistas, que le parece la confesión del alcalde de Victoria, Lalo Gattás, quien ahora reniega del ex gobernador, pero que apenas la semana pasada reconoció que efectivamente sí pactó con él, entre otras cosas el fondo de capitalidad.
Gattás confirmó en entrevista lo que ya sabía todo Tamaulipas: que sí pactó con Cabeza de Vaca. Lo que no dice es qué fue lo que pactó o a cambio de qué.
¿Qué podría darle un alcalde al entonces gobernador? Acaso sería su desaparición por un mes en la recta final de las campañas. O acaso la impunidad para Xico y compañía, pues es fecha que ni siquiera se han presentado denuncias en su contra.
Tampoco nos dice Gattás qué recibió a cambio. Habla del fondo de capitalidad, pero lo cierto es que esos recursos no se ven por ningún lado en Victoria.
¿Las investigaciones en contra del alcalde también fueron parte de la negociación?
Pero si eso no fuera suficiente para retratar su complicidad con el régimen del pasado, que le parece su delirio de andar destapando candidatos como si él fuera el jefe político de Morena.
En primera porque los actuales diputados tienen derecho a reelegirse y no necesitan el consentimiento de Gattás, en segunda porque es facultad del partido la postulación y no bastan sus simples deseos, en tercera porque el partido de Morena en Victoria y Tamaulipas tiene un líder que se llama Américo Villarreal Anaya y es a él quien le corresponde tomar estas decisiones.
Y cuarta y no menos importante, en su delirio Gattás se olvida que quienes salen a votar son los propios victorenses y en todas las encuestas el rechazo a él y a su gobierno cada día es más grande.
3.-Sin palabra. Solo era cuestión de tiempo para que la bronca de Gattás con el Sindicato del Ayuntamiento volviera a estallar, y es que Gattás no sabe cumplir su palabra.
Por eso el diputado Pepe Braña se solidarizó con los trabajadores municipales, pues Gattás sigue incumpliendo las alzas del salario, el quinquenio, los servicios médicos y demás cláusulas del contrato colectivo que se comprometió a cumplir.
Como siempre, Gattás espera que sean las demás autoridades que lleguen a rescatarlo, pero por lo pronto en el Congreso ya le pusieron un alto.
Veremos ahora con que excusa sale el alcalde de la capital.
4.-Como de costumbre. Y donde las cosas siguen igual de siempre es en el PRI Tamaulipas, donde ayer asumió Carlos Solís Gómez la dirigencia estatal tras ser electo por dedazo o como los priistas lo conocen: unanimidad.
Cambia la persona pero no el grupo político detrás de Melhem y compañía, así que se espera más de lo mismo de los tricolores.
Una lástima porque en este partido hay gente muy preparada, por lo menos más que los panistas, que ya demostraron que no saben gobernar.
5.-Falsos. La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Reynosa, se deslindó de un desplegado en el que se involucra a este organismo empresarial.
Dicho desplegado fue utilizado por los panistas zopilotes para atacar al presidente de México y al gobierno de Tamaulipas.
Por eso la presidenta de la Canaco Reynosa, Cecilia Isabel Bueno Salazar rechazó categóricamente la "manipulación" de que fue víctima la Cámara de Comercio en un documento en que se hacía una solicitud al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y al gobernador Américo Villarreal, respecto al tema de la seguridad.
Así que además de falsear noticias también falsean desplegados. A estas alturas, por qué habríamos de sorprendernos.