Apretón de tuercas

“No te pierdas Gloria, quédate cerca, porque vamos a demandar penalmente a quien resulte responsable, la construcción del Hospital General de Madero”, palabras más, palabras menos, le dijo VICENTE HERNÁNDEZ NAVARRO a GLORIA MOLINA GAMBOA, el 30 de septiembre pasado, al recibir el acta administrativa de la Secretaría de Salud.

Un expediente que involucra al nuevo Secretario de Obras Públicas, PEDRO CEPEDA ANAYA, quien seguramente le hizo el mismo comentario a CECILIA DEL ALTO LÓPEZ, ex titular del ramo con FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, sexenio en el que se construyó el citado nosocomio.

“La única solución para que funcione, es derrumbarlo y volverlo a construir”, fue la sentencia que escucharon en Palacio de Gobierno, JORGE ESPINO ASCANIO, GLORIA MOLINA GAMBOA, IRVING BARRIOS MOJICA y demás asistentes, a la reunión convocada por GERARDO PEÑA FLORES.

Reunión en la que, el Subsecretario de Obras Públicas, REYNALDO GARZA GÓMEZ, rayando en el cinismo aseguró que, el Hospital de Madero “no se cae, no se cae”, minimizando las fallas estructurales que presenta.

Pues bien, la sociedad tamaulipeca espera que, los nuevos titulares de las Secretarías hayan transmitido el mismo mensaje a quienes les entregaron la estafeta, particularmente en aquellas en donde el tufo a corrupción se puede percibir a kilómetros de distancia.

En fin, lo cierto es que, el Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, tiene que dar un apretón de tuerca en materia de combate a la corrupción y evitar que el funcionariado cabecista quede en la impunidad.

Una parte importante del voto que logró la alternancia obradorista en junio de 2022, provino de la ciudadanía desencantada y encabronada con los vientos de cambio que le prometieron en 2016.

Hace seis años, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA prometió acabar con la corrupción gubernamental.

Prometió también, atar el desempeño del funcionariado de su gobierno, a un código de ética, y hacer de la transparencia y rendición de cuentas, rutinas cotidianas en el manejo de los recursos públicos.

Esto y más prometió GARCÍA CABEZA DE VACA, en septiembre de 2016, al presentar su “Decálogo” de buen gobierno.

Seis años más tarde, es fácil comprobar que, aquellos diez compromisos no resistieron el primer cañonazo obregonista, recordando la frase acuñada en el gobierno del General ÁLVARO OBREGÓN SALIDO, al decir que, no existe funcionario que resista un disparo de 50 mil pesos.

Mire usted, el cuarto compromiso anunció que, durante la gestión de GARCÍA CABEZA DE VACA, no se tolerarían la corrupción ni los diezmos, al contratar bienes y servicios públicos.

Y sucedió todo lo contrario: la pravedad fue el sello de la gestión cabecista, se concentró en unos cuantos bolsillos y al diezmo lo acribillaron porcentajes mayores, que fueron solicitados a las y los proveedores.

Mientras que, el sexto compromiso de aquél decálogo, prometió optimizar los recursos para hacer más con menos.

A la vuelta de seis años, hacer menos con más, fue la máxima del gobierno de GARCÍA CABEZA DE VACA, al encarecer los costos de la obra pública, así como de los bienes y servicios adquiridos, con el afán de que, el dinero proveniente del “diezmo” fuera mayor.

Una lógica perversa, que fue comentada en infinidad de ocasiones en las sobremesas de Victoria, en donde la economía se colapsó porque el dinero de los Capítulos 2000 (Materiales y Suministros) y 3000 (Servicios Generales) fue a parar a cuentas bancarias de Reynosa y McAllen.

Sin duda alguna, en el combate a la corrupción, el Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA tiene todo el apoyo de la sociedad tamaulipeca, harta del saqueo que presenció entre octubre de 2016 y septiembre de 2022.

Así como el gobierno del Presidente LÓPEZ OBRADOR, ha desempolvado el expediente en contra de FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, así en Tamaulipas el apretón de tuercas al funcionariado cabecista es obligado.

En este sentido, resulta bienvenida la advertencia de VICENTE HERNÁNDEZ NAVARRO, para que GLORIA MOLINA GAMBOA no se pierda ni se aleje de Tamaulipas, porque pronto tendrá que responder ante un juzgado, respecto a la construcción del Hospital General de Madero.

Una obra que puede ser emblemática en el combate a la corrupción, que a la de ya debe iniciar el gobierno de AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.

Que nunca nadie más vuelva a saquear impunemente a Tamaulipas, como sucedió durante el sexenio de GARCÍA CABEZA DE VACA, es una consigna que viene implícita con la Cuarta Transformación, que tendrá 72 meses para enraizar y crecer a lo largo y ancho del estado.

No, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA no está solo en esta cruzada, porque la recuperación y asepsia del servicio público, tan desprestigiado y maltratado por el cabecismo, es una demanda sentida de la sociedad.

Motivo por el cual, la integración de expedientes y las denuncias ante los Juzgados, resulta obligado ante el desastre financiero que dejaron.

Mientras más pronto aprieten las tuercas, mayor gobernabilidad se tendrá.