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Los calambres en las piernas, también conocidos como contracturas, son espasmos musculares dolorosos que pueden venir de repente, sobre todo durante la noche, despertándote de un sueño profundo. Mientras que algunos te atacan en la pantorrilla o en el muslo, otros se apoderan de las plantas de los pies, durando tan sólo unos segundos o hasta varios minutos. Sigue leyendo para saber cómo eliminar esos dolorosos calambres nocturnos.
Elimina la causa de los calambres nocturnos
1 Bebe por lo menos 6 a 8 vasos de agua todos los días para que las vitaminas y minerales puedan ser absorbidos adecuadamente en el cuerpo.
2 Estira las piernas cada noche. Una forma de hacerlo es situarte en una inclinación hacia adelante de unos 30 centímetros de la pared, manteniendo los talones planos y firmes. Desliza tus manos por la pared para alargar los músculos de las piernas. Mantén esta posición durante aproximadamente un minuto.
3 Mantén los músculos flexibles nadando o participando en ejercicios en el agua.
4 Usa zapatos apropiados para caminar y mantente alejada de los tacones altos.
5 Asegúrate de que estás recibiendo suficiente calcio, potasio, magnesio y vitaminas E y A.
6 Incluye plátanos, tomates, papas, brócoli, melón y cítricos en tu dieta diaria. Estos alimentos contienen potasio, que es un mineral clave para ayudar a regular la actividad muscular.
Elimina la causa de los calambres nocturnos
1 Bebe por lo menos 6 a 8 vasos de agua todos los días para que las vitaminas y minerales puedan ser absorbidos adecuadamente en el cuerpo.
2 Estira las piernas cada noche. Una forma de hacerlo es situarte en una inclinación hacia adelante de unos 30 centímetros de la pared, manteniendo los talones planos y firmes. Desliza tus manos por la pared para alargar los músculos de las piernas. Mantén esta posición durante aproximadamente un minuto.
3 Mantén los músculos flexibles nadando o participando en ejercicios en el agua.
4 Usa zapatos apropiados para caminar y mantente alejada de los tacones altos.
5 Asegúrate de que estás recibiendo suficiente calcio, potasio, magnesio y vitaminas E y A.
6 Incluye plátanos, tomates, papas, brócoli, melón y cítricos en tu dieta diaria. Estos alimentos contienen potasio, que es un mineral clave para ayudar a regular la actividad muscular.