Muere cuando hacía "bizne"
El occiso estaba tratando de vender un horno de microondas cuando sufrió presuntamente un letal infarto que acabo son su existencia frente al que iba a ser su comprador.
Compartir:
Reynosa, Tam.- La muerte sorprendió a un sexagenario residente de la colonia Aquiles Serdán, pues cuando ofrecía un microondas a una familia de Estación Anzaldúas, cayó fulminado como si hubiera recibido una descarga eléctrica, al sufrir un paro cardíaco que le cortó la vida de tajo.
Los lamentables hechos sucedieron poco después de las 18:00 horas, en un domicilio que se ubica junto a las vías del tren en el kilómetro doce de la carretera Ribereña, en donde estaban las graveras.
Al lugar se constituyó el licenciado Alejandro Cruz Tovar, fiscal de la Agencia Sexta del Ministerio Público, acompañado por su oficial secretario, Ernesto Escobar y por agentes federales del Grupo de Homicidios de la Policía Ministerial.
El hoy occiso fue identificado mediante su credencial de elector como José Guadalupe Torres Pérez, quien contaba con 63 años y residía en la colonia Aquiles Serdán pero era conocido en Estación Anzaldúas, por lo que se dirigió hacia aquel lugar para tratar de vender un microondas. La víctima llegó a la casa del señor Turcio Salvador, de 63 años, a quien le ofreció el aparato, “Yo le dije que no tenía dinero, en ese momento me pidió agua, luego se sentó y de repente cayó”, señaló.
Finalmente dijo que pidió el apoyo de la Cruz Roja pero que los paramédicos llegaron sólo para confirmar que había dejado de existir, llamándose a las autoridades ministeriales para que dieran fe.
Al lugar se constituyó el licenciado Alejandro Cruz Tovar, fiscal de la Agencia Sexta del Ministerio Público, acompañado por su oficial secretario, Ernesto Escobar y por agentes federales del Grupo de Homicidios de la Policía Ministerial.
El hoy occiso fue identificado mediante su credencial de elector como José Guadalupe Torres Pérez, quien contaba con 63 años y residía en la colonia Aquiles Serdán pero era conocido en Estación Anzaldúas, por lo que se dirigió hacia aquel lugar para tratar de vender un microondas. La víctima llegó a la casa del señor Turcio Salvador, de 63 años, a quien le ofreció el aparato, “Yo le dije que no tenía dinero, en ese momento me pidió agua, luego se sentó y de repente cayó”, señaló.
Finalmente dijo que pidió el apoyo de la Cruz Roja pero que los paramédicos llegaron sólo para confirmar que había dejado de existir, llamándose a las autoridades ministeriales para que dieran fe.