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Conforme avanza el proceso electoral Tamaulipas 2016, el PRI se perfila para tener un solo "enemigo" a vencer en las urnas el domingo 5 de junio.
Un "enemigo" al que muchas veces ha subestimado pero que ya le ha demostrado en los hechos, el nivel de su poderío.
Un "enemigo" en realidad, sumamente peligroso puesto que no tiene rostro, ni nombre, ni color, ni siglas... ni precio.
El "enemigo" del PRI no es ni será el PAN que sobre la mesa siguen partiendo el Senador Francisco García Cabeza de Vaca y los Alcaldes Leticia Salazar (de Matamoros) y Carlos Canturosas (de Nuevo Laredo).
En la vida, no hay migajas que sepan bien. En la política, menos.
Y no, el "enemigo" del PRI tampoco es ni será un candidato independiente mucho menos el de una mega-alianza de oposición.
No es ni será el candidato de Encuentro Social ni de Morena ni de Movimiento Ciudadano.
Por el contrario.
En teoría, entre más candidatos haya, menos serán las posibilidades de vencer al PRI.
En el contexto actual, en el que nadie aplaude, el real y único"enemigo" del PRI es y será... el electorado (parte del cual esta incluso, dentro de su misma estructura).
Como usted ya sabe, nada nuevo pues cuando el "enemigo" se presentó (en el 2012) dejó un amargo sabor a derrota que sería imposible e imperdonable olvidar.
Cierto, el próximo domingo 5 de junio, además del PAN, el electorado tendrá más y nuevas opciones para votar.
El voto entonces sí, podría dividirse y el PRI le estaría apostando a su voto duro.
Matemáticamente el Partido aseguraría su triunfo pero... también sería imposible e imperdonable olvidar que en las elecciones del 2012 quedo más que claro que ya ningún Partido gana elecciones con su voto duro; que los electores no votan por otros Partidos, sino en contra del PRI y sobretodo, que el electorado si es capaz de revelarse para demostrar, que es realmente el que decide.
Entonces... el próximo domingo 5 de junio no será ninguno de los candidatos de la oposición ni independiente quien pueda derrotar al PRI.
El único riesgo de perder para el PRI, es y será el voto de castigo, y para disminuirlo, al Partido sólo le resta elegir como candidato no sólo al menos peor, sino al que garantice además capacidad para reconquistar y seducir al electorado.
Mientras oficialmente no se diga lo contrario, la baraja sobre la mesa sigue siendo amplia: Baltazar Hinojosa, Alejandro Guevara, Marco Bernal, Edgar Melhem, Alejandro Etienne, Ramiro Ramos, Enrique Cárdenas, Mercedes Guillén.
@Yadira_Tejeda
Un "enemigo" al que muchas veces ha subestimado pero que ya le ha demostrado en los hechos, el nivel de su poderío.
Un "enemigo" en realidad, sumamente peligroso puesto que no tiene rostro, ni nombre, ni color, ni siglas... ni precio.
El "enemigo" del PRI no es ni será el PAN que sobre la mesa siguen partiendo el Senador Francisco García Cabeza de Vaca y los Alcaldes Leticia Salazar (de Matamoros) y Carlos Canturosas (de Nuevo Laredo).
En la vida, no hay migajas que sepan bien. En la política, menos.
Y no, el "enemigo" del PRI tampoco es ni será un candidato independiente mucho menos el de una mega-alianza de oposición.
No es ni será el candidato de Encuentro Social ni de Morena ni de Movimiento Ciudadano.
Por el contrario.
En teoría, entre más candidatos haya, menos serán las posibilidades de vencer al PRI.
En el contexto actual, en el que nadie aplaude, el real y único"enemigo" del PRI es y será... el electorado (parte del cual esta incluso, dentro de su misma estructura).
Como usted ya sabe, nada nuevo pues cuando el "enemigo" se presentó (en el 2012) dejó un amargo sabor a derrota que sería imposible e imperdonable olvidar.
Cierto, el próximo domingo 5 de junio, además del PAN, el electorado tendrá más y nuevas opciones para votar.
El voto entonces sí, podría dividirse y el PRI le estaría apostando a su voto duro.
Matemáticamente el Partido aseguraría su triunfo pero... también sería imposible e imperdonable olvidar que en las elecciones del 2012 quedo más que claro que ya ningún Partido gana elecciones con su voto duro; que los electores no votan por otros Partidos, sino en contra del PRI y sobretodo, que el electorado si es capaz de revelarse para demostrar, que es realmente el que decide.
Entonces... el próximo domingo 5 de junio no será ninguno de los candidatos de la oposición ni independiente quien pueda derrotar al PRI.
El único riesgo de perder para el PRI, es y será el voto de castigo, y para disminuirlo, al Partido sólo le resta elegir como candidato no sólo al menos peor, sino al que garantice además capacidad para reconquistar y seducir al electorado.
Mientras oficialmente no se diga lo contrario, la baraja sobre la mesa sigue siendo amplia: Baltazar Hinojosa, Alejandro Guevara, Marco Bernal, Edgar Melhem, Alejandro Etienne, Ramiro Ramos, Enrique Cárdenas, Mercedes Guillén.
@Yadira_Tejeda