Cómo desengancharnos de una relación que nos hace sufrir

Por más que duela es necesario dejarlo ir

Cuando sufrimos una desilusión y tenemos que olvidar a la que fue nuestra pareja nos encontramos con que a veces sin darnos cuenta seguimos pensando en él.

Sabemos que tenemos que dejar de hacerlo pues es necesario para nuestra salud mental y proseguir con nuestra vida.

Cómo desengancharnos de una relación que nos hace sufrir

Entre los problemas que con más frecuencia nos encontramos a la hora de desengacharnos son:

Algo que se conoce como el síndrome de abstinencia. Es decir, esos síntomas ansiosos depresivos habituales en cualquier ruptura.

Síntomas que se potencializan en una relación adictiva y las sensaciones pueden alcanzar cuotas de angustia muy altas, muchas veces se tienen constantes impulsos de querer retomar a la relación.

Cómo desengancharnos de una relación que nos hace sufrir

El ego, esta es una de las trampas más sutiles que todas las mujeres tenemos cuando somos abandonadas.

Vemos a la expareja como a un enemigo al que hay que vencer. Sin embargo, en estos momentos debemos recordar que el único enemigo real es la adicción, la costumbre, la rutina y es con ello contra lo que debemos luchar.

El miedo. Luchamos por miedo a la soledad, a no volver a amar, a no ser felices, a tener profundos pensamientos que nos impidan la estabilidad, en pocas palabras, tenemos miedo al vacío.

Tienes que saber que todos estos temores se basan en un sentir temporal y no en un futuro real.

 

 

 

Después de la separación, date tiempo para superar la pérdida, el conflicto de emociones, pero después de un rato si sigues sufriendo, te enfermaras, te obsesionaras, te anularas y te destruirás. 

Si te obsesionas queriendo recuperar la primera etapa de la relación y crees que la fase de la seducción fue la real y que el comportamiento posterior fue solo una consecuencia de las acciones erróneas que hiciste.

Entonces es hora de que te des cuenta que en realidad la fase de la seducción no existe, lo real es lo que acontece después. Es cuando cada uno saca el yo verdadero. 

Debes estar consciente de si realmente quieres desengancharte para proseguir con tu vida, perdonar y perdonarte.

 

Para ello, tienes que tomar las riendas de tu vida, es decir, volver a pensar en ti, subir tu autoestima, creer nuevamente en ti, decidir continuar viviendo y reconocer que la vida no se acaba con él.

Te espera un mundo de nuevas experiencias, con o sin pareja, es hermoso vivir y la felicidad inicia desde dentro de ti.

 

Cómo desengancharnos de una relación que nos hace sufrir

Si no puedes hacerlo sola es necesario que pidas ayuda a un especialista, verás que dentro de un tiempo todo cambia. 

Mientras tanto puedes tener contacto cero. Al menos al principio trata de no tener contacto con él. No es conveniente sigas viéndolo, tanto físicamente como por las redes, para qué estar recordando lo que viviste.

 

Libérate de la culpa, trabaja en la aceptación de lo que pasó, sal con tus amigas, realiza actividades que te mantengan ocupada, haz ejercicio.

Finalmente, con el paso del tiempo te darás cuenta que la herida ha cerrado y que estás lista para volver a amar.