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No todos los perros y gatos se llevan mal como dice un popular dicho. Esto lo demuestran estos dos cachorros, quienes demuestran todo su cariño en las redes sociales, principalmente en Instagram.
Little Raven es un perro tamaskan husky que se sentía solo en la casa donde vivía, por lo que necesitaba un amigo. Al percatarse de ello, su dueña, Christina, decidió elegirle un mejor amigo.
Así fue como se llevó a Raven a un refugio de animales en Lubbock, Texas. Donde Raven eligió su compañera.
Christina contó a la página web “The Dodo” que siempre quiso tener un perro y gato para que crecieran juntos. “Quería que fueran capaces de llevarse bien. Así que quería que conociera personalmente al gato y que el gato se llevara bien con ella.”
Little Raven es un perro tamaskan husky que se sentía solo en la casa donde vivía, por lo que necesitaba un amigo. Al percatarse de ello, su dueña, Christina, decidió elegirle un mejor amigo.
Así fue como se llevó a Raven a un refugio de animales en Lubbock, Texas. Donde Raven eligió su compañera.
Christina contó a la página web “The Dodo” que siempre quiso tener un perro y gato para que crecieran juntos. “Quería que fueran capaces de llevarse bien. Así que quería que conociera personalmente al gato y que el gato se llevara bien con ella.”
Cuando ella llevo a su fiel Raven, no mostró mucho interés por los gatos, excepto por una, llamada Woodhouse. Desde ese momento, ellos se volvieron inseparables.
Así fue como la gatita no sólo consiguió un hogar, sino también una mejor amiga. Con quien comparte varios lindos momentos en Instagram.
“Son perfectas una con otra”, cuenta la dueña de ambas. Esta pareja de mascotas se han vuelto sensación en Instagram. Allí ellas demuestran que viven en armonía y felicidad. Comparten el mueble para dormir e incluso se respetan la hora de comer.
