Tener novio engorda, según estudio
Las mujeres llegan a subir hasta 10 kilos cuando se encuentran en una relación estable y comprometida
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Piensa un momento en tu relación actual o en las pasadas ¿tu peso se ha visto afectado? si la respuesta es SÍ, no te preocupes, no eres la única, ya que según algunos investigadores, el estar en un relación trae como consecuencia el aumento de peso.
¿Quieres saber por qué? No dejes de leer.
De acuerdo a las investigaciones de la Universidad de Queensland, en Australia, la mayoría de las mujeres tienden a subir aproximadamente 10 kilos cuando entran en una relación seria, mientras que los hombres llegan a aumentar hasta 7 kilos.
¿La razón? La felicidad y la comida van de la mano y también la necesidad de compartir con el ser amado el placer de un buen platillo.
De acuerdo a la nutrióloga Lidiane Martins, iniciar una relación estable con una persona es una forma de bajar un poco la guardia, ya que nos sentimos amados, aceptados y deseados. Básicamente, es como decir que se han superado todas las pruebas y el miedo a no gustar a la otra persona queda en el olvido.
Sin embargo, esto puede ser contraproducente, pues si bien es recomendable que la preocupación de la apariencia y los números en la báscula no sean prioridad en nuestra vida, el descuidar nuestra salud puede ocasionar aumento de peso y por lo tanto, afectar nuestras relaciones personales.
Por otro lado, también suele pasar que cultivamos los hábitos de nuestra pareja sin darnos cuenta; si nuestro estilo de vida es "normal" y el de nuestra pareja un poco más "excesivo", tendemos a complacer los deseos del otro porque es una forma de mostrar afecto.
Y ¿CÓMO SE PODRÍA EVITAR ESTA SITUACIÓN?
Lo único negativo de todo esto es que la salud de ambos se puede ver afectada. Si ninguno de los dos acostumbra a someterse a dietas o hacer ejercicio, podrían entonces limitar el consumo de comida chatarra cuando salen, hacer selecciones más saludables en las compras del súper e iniciar nuevas actividades físicas que ambos disfruten, para mantener el cuerpo en movimiento.
Otras recomendaciones serían:
- No tener alcohol en casa y dejar las bebidas sólo para ocasiones especiales.
- Cocinar más en casa y reducir las visitas a restaurantes de comida rápida.
- No tomar los cambios de forma personal, simplemente verlo como una buena forma de mantenerse sanos y fuertes.
Lo más importante aquí es la comunicación y cuidar la salud de ambos; si tus kilitos de más te están incomodando, no hay mejor solución que un ajuste de los malos hábitos.
¿Quieres saber por qué? No dejes de leer.
De acuerdo a las investigaciones de la Universidad de Queensland, en Australia, la mayoría de las mujeres tienden a subir aproximadamente 10 kilos cuando entran en una relación seria, mientras que los hombres llegan a aumentar hasta 7 kilos.
¿La razón? La felicidad y la comida van de la mano y también la necesidad de compartir con el ser amado el placer de un buen platillo.
De acuerdo a la nutrióloga Lidiane Martins, iniciar una relación estable con una persona es una forma de bajar un poco la guardia, ya que nos sentimos amados, aceptados y deseados. Básicamente, es como decir que se han superado todas las pruebas y el miedo a no gustar a la otra persona queda en el olvido.
Sin embargo, esto puede ser contraproducente, pues si bien es recomendable que la preocupación de la apariencia y los números en la báscula no sean prioridad en nuestra vida, el descuidar nuestra salud puede ocasionar aumento de peso y por lo tanto, afectar nuestras relaciones personales.
Por otro lado, también suele pasar que cultivamos los hábitos de nuestra pareja sin darnos cuenta; si nuestro estilo de vida es "normal" y el de nuestra pareja un poco más "excesivo", tendemos a complacer los deseos del otro porque es una forma de mostrar afecto.
Y ¿CÓMO SE PODRÍA EVITAR ESTA SITUACIÓN?
Lo único negativo de todo esto es que la salud de ambos se puede ver afectada. Si ninguno de los dos acostumbra a someterse a dietas o hacer ejercicio, podrían entonces limitar el consumo de comida chatarra cuando salen, hacer selecciones más saludables en las compras del súper e iniciar nuevas actividades físicas que ambos disfruten, para mantener el cuerpo en movimiento.
Otras recomendaciones serían:
- No tener alcohol en casa y dejar las bebidas sólo para ocasiones especiales.
- Cocinar más en casa y reducir las visitas a restaurantes de comida rápida.
- No tomar los cambios de forma personal, simplemente verlo como una buena forma de mantenerse sanos y fuertes.
Lo más importante aquí es la comunicación y cuidar la salud de ambos; si tus kilitos de más te están incomodando, no hay mejor solución que un ajuste de los malos hábitos.