Los Diputados y los “Table Dance”

A menos de que haya arrepentimiento de último minuto, este día los diputados iniciarán el análisis de la iniciativa de decreto promovida por el Gobernador, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, que busca prohibir la instalación en la entidad de Casinos y de los llamados “table dance”.



Es muy probable que baste una sola reunión de las Comisiones de Puntos Constitucionales, la de Desarrollo Urbano y Puertos, y la de Estudios Legislativos,  para que la iniciativa sea dictaminada.

De ser así, sería llevada ante el Pleno mañana mismo, para ser votada y aprobada.



Aquí mismo le decía la semana pasada que, aunque la iniciativa demuestra la férrea decisión del Gobierno de Cabeza de Vaca para atacar las fuentes de financiamiento del crimen organizado, lo cual es de aplaudirse, resultará inevitable encontrar oposición a la misma. Habrá mucha polémica, le adelantaba.



Y sí, efectivamente, la polémica inició desde el jueves cuando la información fue difundida con abundancia por los medios de comunicación. A favor y en contra se han emitido bastantes posicionamientos, lo cual es bueno porque ayudará a tomar la mejor decisión en ese tema.



Por ejemplo, el sector empresarial en voz de Julio Almanza Armas, presidente de Fecanaco en Tamaulipas, hizo un llamado a la cordura, al análisis profundo y concienzudo,  antes de tomar una decisión.



Almanza no lo admitió abiertamente, tal vez por cortesía política con el promovente de la acción legislativa, pero en sus declaraciones se infiere un rechazo a la prohibición.



“Van a pagar justos por pecadores porque no todos los Casinos y ‘Table Dance’ están vinculados a la delincuencia. Además se puede generar la prostitución clandestina y se afectará al turismo”, advirtió el matamorense.



Quienes no ven con buenos ojos la propuesta, argumentan, con razón, que cerrar los llamados giros negros no hará ni cosquillas a las finanzas criminales, porque lo que verdaderamente nutre a los grupos delincuenciales son otras actividades, como el narcotráfico a grande escala, el narcomenudeo, el cobro de “piso” y los secuestros.



Por otro lado, anticipan que la justicia federal podría revertir, en vía de amparo, la prohibición para instalar un Casino o un Table Dance, como ya ha sucedido en múltiples ocasiones en otras entidades.



En lo  personal queremos insistir en que la sola presentación de la iniciativa deja constancia del genuino interés del gobernador Cabeza de Vaca por atacar a los grupos delincuenciales.



El asunto está en que,  frente a una decisión de ese tipo, siempre será sano y responsable tomarle el parecer a la sociedad, y sobre todo a quienes, como el sector empresarial, se verán perjudicados por la prohibición.



Esperemos entonces que haya la suficiente capacidad de los involucrados para consensuar la mejor decisión para la ciudadanía.



En la búsqueda de ese consenso, habrá que preguntarse: ¿realmente la prohibición de giros negros va a debilitar a los grupos criminales?



¿No irán a ser más los perjuicios que los beneficios al cerrarse fuentes de empleo, fomentarse la prostitución y alejar el turismo?



¿Una reforma de esa naturaleza no contraviene una ley federal o la Constitución misma?



Definitivamente se trata de un tema que los Poderes Ejecutivo y Legislativo deben tratar con pinzas.



ASÍ ANDAN LAS COSAS



roger_rogelio@hotmail.com