¡Ayudemos a Esthelita en esta difícil prueba!
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Los padres de familia sin empleo son los que sufren más durante la pandemia, al no contar con recursos ni seguro para cubrir la atención médica de sus hijos e hijas.
Esthela Mariel de Leija Chávez, “Esthelita”, es una niña que se encuentra en el Hospital Infantil desde hace dos semanas con diagnóstico de Hidrocefalia y desnutrición.
De 1 año y dos meses de edad, la niña está en espera de la colocación de una válvula que drene el líquido de su cabeza.
“Tiene hidrocefalia y desnutrición severa, la van a operar y no tenemos para los gastos médicos y medicamentos que no cubre el seguro popular; no sabemos todavía cuánto nos van a cobrar”, dice Sugey Milagros, madre de la niña.
Sugey Milagros no tiene empleo debido a la pandemia de coronavirus; sus padres, los abuelos de Esthelita, la apoyan en lo que pueden.
Doña Martha, la abuela de Esthelita, se dedica a la venta de nopales, ese ingreso es la única entrada de dinero al hogar.
Las diez bolsitas que vende a diario, que sería un total de 100 pesos, no cubren las necesidades mínimas de ninguna familia.
Además del costo de la cirugía de implantación de válvula que se cotiza en más de 30 mil pesos, necesitan comprar leche, pañales y medicamentos.
“Le dan medicamentos para controlar las crisis convulsivas, creo que ya mandaron pedir la válvula pero sí tenemos que pagar por la operación”.
Se necesita del apoyo de la buena comunidad de Ciudad Victoria para proveer a Esthelita y a su familia de lo siguiente.
- Pañales talla mediana
- Leche Nan sin lactosa
- Aportación económica para reunir el costo de la cirugía y medicamentos.
Para la aportación económica desde 20 pesos favor de depositar a la tarjeta Santander Serfín 5579 1001 8100 6980.
Para apoyar con pañales y leche llamar a 8342559397 y 8342587887 o acudir a la manzana 49 lote 29, Calle Río Magdalena en la Colonia ampliación Luis Echeverría.
Que no se olvide: los niños y niñas son lo más valioso e inocente del mun. Cuidar sus vidas y protegerlos es un deber humano.
Vamos a proteger a nuestros niños y niñas victorenses... ¡ayudemos a Esthelita!