El Canciller

No obstante que el artículo 73, fracción XVI de la Carta Magna, y el artículo 15 de la Ley General de Salud, señala la jerarquía de las autoridades a cargo de conducir las acciones en tiempos de pandemias, ni el Presidente LÓPEZ OBRADOR ni su Secretario de Salud, JORGE ALCOCER, se encuentran al frente de las tropas, en la batalla contra el COVID-2019.

Quien se encarga de mantener informada a la sociedad mexicana y tiene la batuta en la estrategia para enfrentar al coronavirus, es el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, HUGO LÓPEZ GATELL.

Usted me puede decir que, LÓPEZ GATELL tiene una formación académica de primer nivel y que como epidemiólogo, cuenta con el perfil para comandar esta batalla, a diferencia del Secretario JORGE ALCOCER VARELA, quien si bien es cierto, es un destacado médico, investigados y catedrático, su fuerte es la inmunología y la reumatología.

Está bien, se la compro, pero qué me dice del encargado de dar a conocer la declaratoria de emergencia sanitaria en televisión nacional, el Secretario de Relaciones Exteriores MARCELO LUIS EBRARD CASAUBON, quien si bien es cierto cuenta con una sólida formación académica, es internacionalista por el Colegio de México y politólogo por la Escuela Nacional de Administración de París, su fuerte obviamente no es la medicina ni la salubridad.

Lo cierto es que, la pandemia del COVID-19 confirma la confianza que tiene el Presidente LÓPEZ OBRADOR en su Canciller: al colocarlo en el frente de batalla, también lo ubica como puntero en la sucesión presidencial, aunque nos encontremos apenas en el segundo año de la 4T.

Por cierto, no es la primera vez que a un Canciller mexicano se le asigna una tarea ajena a sus atribuciones, y EBRARD lo sabe muy bien porque vivió este episodio muy de cerca.

Hagamos memoria y remontémonos a enero de 1994, cuando MARCOS y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, le arruinan el festejo de la firma del Tratado de Libre Comercio, a CARLOS SALINAS DE GORTARI.

¿Recuerdan de  quién echó mano el Presidente SALINAS para dialogar con el EZLN y pactar la paz?

No fue el Secretario de Gobernación PATROCINIO GONZÁLEZ GARRIDO, ex gobernador de Chiapas que fue renunciado y relevado de la SEGOB por JORGE CARPIZO MCGREGOR.

Tampoco echó mano del Secretario de Desarrollo Social y hombre de toda su confianza, CARLOS ROJAS GUTIÉRREZ, porque desde la SEDESOL cubría las espaldas al candidato presidencial, LUIS DONALDO COLOSIO.

No fue el Procurador General de Justicia, DIEGO VALADÉS RÍOS, quien fue relevado del cargo con la sublevación zapatista por HUMBERTO BENITEZ, ni fue VÍCTOR CERVERA PACHECO, titular de la Reforma Agraria.

¿Ya se acordó verdad? Exactamente, CARLOS SALINAS DE GORTARI sacó de la Cancillería Mexicana a MANUEL CAMACHO SOLÍS, su amigo desde la UNAM,  y lo envió a la selva lacandona a negociar con el Subcomandante MARCOS la rendición del EZLN, lo que molestó enormemente a COLOSIO

Así es, el Canciller Mexicano dejó los asuntos internacionales en manos de MANUEL TELLO y se fue a la selva lacandona, llevando como mano derecha al Subsecretario de Relaciones Exteriores, MARCELO EBRARD, quien fue el encargado de la estrategia de pacificación.

Por eso le digo que no es la primera vez que al Canciller Mexicano, lo mandan a un frente de batalla ajeno a sus atribuciones, sin dudar de la capacidad que tiene MARCELO EBRARD, en este caso en particular, para encabezar a las tropas nacionales que combatirán al COVID-19, causando malestar en otros espacios de poder con aspiración presidencial, como en el Senado.

Lo que significa que, ni el Presidente LÓPEZ OBRADOR ni el Secretario de Salud, JORGE ALCOCER, estén donde debieran de estar, como lo señala la Carta Magna y la Ley General de Salud: haciendo punta desde el Consejo de Salubridad General, en contra de la pandemia.

Vaya paradoja: el némesis de ANDRÉS MANUEL hizo los mismo que él hace 26 años: apoyarse en su Canciller en tiempos convulsos.