Alerta en Victoria

En varias ocasiones lo hemos advertido aquí: el incremento desorbitado del número de vehículos que circulan en Ciudad Victoria se va a salir de control. En algún momento hará crisis.

No podemos esperar algo diferente ante el impune contrabando de vehículos de procedencia extranjera que hace que a diario lleguen a la Capital del Estado decenas de unidades de las popularmente conocidas como “chocolates”.

Sumados los “americanos” a los automóviles nacionales nuevos que salen de las agencias,  y a  los usados que son traídos de otras entidades del país, es inevitable que en algún momento las vialidades capitalinas queden rebasadas. No hay ciudad que aguante ese crecimiento vehicular.

Le cuento de ello porque ayer el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMC) dio la voz de alerta al respecto.

Según un estudio reciente, en Ciudad Victoria hay 250 mil vehículos circulando en las calles, entre particulares y unidades del transporte público. El promedio por persona es de 1.2 vehículos.

Debido a la saturación de automóviles, los conductores perdemos al año 53 horas atrapados en el caos vehicular.

El IMCO señala que el costo de la saturación vehicular ha representado para los tamaulipecos 314 millones 270 mil pesos.

Ante esa realidad avasalladora, es urgente que los Gobiernos, el Estatal y sobre todo el municipal, hagan algo al respecto. No pueden esperar a tener encima la crisis para andar buscando alternativas de solución.

Desde ya las autoridades vinculadas al transporte público deben comenzar a trabajar en el diseño de estrategias, incluso legislativas, que ordenen el parque vehicular.

Sin embargo, en lo inmediato deben combatir con seriedad y dureza el contrabando de vehículos americanos para evitar que sigan agravando la situación, y a la vez tienen que trabajar en el diseño de una medida que permita sujetar legalmente a aquellas unidades que ya están aquí.

El contrabando de autos “chocolates” se ha convertido en un negocio redondo para muchas personas y para presuntas organizaciones sociales que ante el sospechoso silencio de la autoridad, han “inundado” ciudades como la nuestra con ese tipo de automóviles, que en su mayoría es chatarra estadounidense.

Para todos aquellos ciudadanos que se esmeran por cumplir con sus obligaciones tributarias sigue siendo lastimoso y ofensivo ver como circulan impunemente vehículos sin placas o con imitaciones de placas, a todas luces sin validez legal, cuyos dueños no pagan impuestos.

Eso desalienta a los ciudadanos responsables y cumplidores de su obligación como contribuyente, pero a la vez fomenta lo ilícito porque seguramente habrá muchos que, ante la oportunidad de no pagar impuestos, opten por comprarse un coche “chocolate”.

Por todo ello, ojalá y que la alerta que emitió el IMCO sea atendida con la urgencia debida. Es un tema que no puede ni debe ser aplazado. Me parece que aún es tiempo de evitar la crisis.

EL RESTO

JUGAR CON FUEGO.- El Gobierno federal sigue subestimando a los productores agropecuarios del país.

No mide en su real magnitud el riesgo de una rebelión nacional de agricultores, ganaderos, pescadores y otros productores del campo.

Tan no advierte el riesgo que sigue castigando presupuestariamente al sector. En el 2020 proyecta reducir en 20 mil millones de pesos el  presupuesto, lo que vendrá a sepultar prácticamente la agricultura comercial.

No se trata de ser catastrofista, pero una rebelión en el campo está en franca gestación. ¡Aguas!.

ASÍ ANDAN LAS COSAS

roger_rogelio@hotmail.com