A partir de 2019 un kilo ya no pesará un kilo

La constante de Planck (H) podría convertirse en la nueva medición universal del kilogramo
Compartir:

CIUDAD DE MÉXICO.- Después de décadas de innovadores trabajos de laboratorio, la comunidad científica y técnica del mundo está a punto de redefinir cuatro de las siete unidades base para el Sistema Internacional de Unidades (SI). 

La votación para adoptar el cambio está programada para el 16 de noviembre de 2018, en Versalles, Francia. 

Un voto afirmativo significaría que el kilogramo (masa), el kelvin (temperatura), el amperio (corriente eléctrica) y el mole (cantidad de sustancia) serían determinados por constantes fundamentales de la naturaleza en lugar de por objetos físicos. 

a

Este cambio histórico será el cambio individual más grande en la medición internacional desde que se firmó el Tratado del Medidor en 1875. 

Los científicos esperan que este cambio estimule la innovación tecnológica y reduzca el costo de muchos procesos de fabricación de alta tecnología.

Durante 130 años fue el referente absoluto: el "gran K", un cilindro de platino e iridio conservado en Francia, que será sustituido por una constante matemática que fijará lo que es exactamente un kilo, en la era de las tecnologías de alta precisión.

Como no es posible calibrar todas las balanzas del mundo en función de este objeto, existen seis copias-testigo.

La 26ª reunión de la Conferencia General de Pesos y Medidas, que se celebra entre el martes y mañana viernes en Versalles, al oeste de París, prevé aprobar una nueva definición del kilo formulada a partir de la constante de Planck (h) de la física cuántica.

- La pequeña h -

Oficialmente, el "gran K" cederá su lugar en mayo a la pequeña "h". Esta constante, descubierta en 1900 por el físico Max Planck es el producto de una energía por un tiempo.

La unidad seguirá siendo la misma, es decir, se seguirá hablando de kilos; solo cambiará su definición.

Pero ¿por qué este cambio? El objeto físico vive su vida, puede fluctuar , lo que plantea un problema dado los niveles de precisión que necesitamos hoy en día, con las tecnologías de alta precisión.

Los científicos se dieron cuenta de que si bien el prototipo y las copias fueron fabricados en la misma época, de la misma manera y conservados en las mismas condiciones, la masa del primero varió respecto al resto, de unos 50 microgramos.

Y ello, pese a que el BIPM multiplicó las precauciones para protegerlo. "Está conservado bajo tres campanas de cristal, en una caja fuerte situada en una sala ultra-limpia del sótano" del Pabellón de Breteuil de Sèvres, indica Estefania De Mirandes, secretaria ejecutiva del Comité Consultor de las Unidades del BIPM.

La caja está cerrada con tres llaves, conservadas por tres responsables que deben estar presentes simultáneamente para poderla abrir. El acceso a la sala requiere una autorización especial. Una vez al año, se abre la caja para verificar el estado del IPK.

Todas estas medidas dejarán de ser necesarias con la sustitución del cilindro por la constante de Planck, que se medirá mediante una balanza de Watt, también llamada balanza de Kibble, en referencia a su inventor, el físico británico Bryan Kibble, que logró convertir una masa en una potencia eléctrica medida en vatios.

Pocos países poseen actualmente una Balanza de Watt, entre ellos Francia.

La Conferencia General de Pesos y Medidas reúne a representantes de los 60 Estados miembros y de 42 países y entidades económicas asociadas.

Los tiempos cambian, versión gráfica y detallada.