El Presidente necesita consejero

En un país como el nuestro, que lleva ya más de una década sumido en un terrible baño de sangre, resulta inconcebible que un Presidente de la República realice sus actividades sin la mínima protección.

Con una delincuencia adueñada de todos los espacios públicos y con presencia hasta en los sitios más inconcebibles, el que Andrés Manuel López Obrador transite sin seguridad personal es irresponsable por cualquier lado que se le vea.

Es cierto que uno de sus compromisos de campaña fue no usar al Estado Mayor presidencial, pero desde el momento en que ganó la elección, y formalmente a partir del uno de diciembre próximo, pasará a ser el Presidente de todos los mexicanos, hayamos o no votado por él.

Luego entonces, bajo esa investidura presidencial Andrés Manuel está más obligado a anteponer los intereses colectivos a los propios.

A partir de entonces, lo que Andrés Manuel decida deberá ser en función de lo que mejor convenga  al pueblo mexicano, y en ese sentido a los mexicanos lo que menos nos conviene es una tragedia que nos deje repentinamente sin Presidente.

E insisto, en un país convulsionado por la delincuencia pensar en una tragedia no es algo desproporcionado ni exagerado.

Entiendo que Andrés Manuel se aferre a su promesa de no usar la seguridad del Estado Mayor Presidencial por el costo político que le implicaría incumplirla, pero en las condiciones que vive el país es preferible eso a las consecuencias de una desgracia.

Total, si ya rompió otros de sus compromisos de campaña, ¿por qué no hacerlo con éste?

Ayer, por ejemplo, en su visita a Tamaulipas el tabasqueño se vio vulnerable por todos lados. Desde que bajó del avión comercial que lo trasladó a la Capital del Estado, fue rodeado por una multitud de simpatizantes y periodistas, los primeros para saludarlo y los segundos para entrevistarlo.

Cualquier mano criminal pudo haberse confundido en la multitud para hacer daño. A eso me refiero cuando digo que es irresponsable e inconcebible que Andrés Manuel se empeñe en rechazar la protección personal.

Ojalá y que su círculo más cercano logre hacerlo entrar en razón. Es un atrevimiento y una insensatez seguir retando al riesgo fatal.

El Presidente necesita quien lo aconseje. Por el bien de todos, y sobre todo por el bien de país, hay que hacerlo entrar en razón.

EL RESTO

DOCTOR DIPUTADO.- El ginecólogo Juan Carlos Decilos García, asumió ayer como diputado de la Sexagésima Tercera Legislatura.

El mantense ocupará la curul que dejó su colega, Pedro Luis Ramírez Perales, quien pidió licencia para dedicarse de lleno a su encargo como líder de la sección X del sindicato del IMSS.

Esperemos que Decilos García sea un legislador más activo que Perales, porque éste brilló más por sus ausencias que por su tarea legislativa.

BIEN LIBRADO.- El Procurador General de Justicia del Estado, Irving Barrios Mojica, salió bien librado de su comparecencia ante el Congreso del Estado para la glosa del segundo informe de labores del Gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca.

Le funcionó a la perfección la estrategia de no negar lo innegable al admitir que a su dependencia le falta mucho por hacer y que no alcanza nivel de excelencia.

ASÍ ANDAN LAS COSAS
roger_rogelio@hotmail.com