Austeridad al extremo 

Los diputados federales de MORENA tienen la esperanza de que el próximo pago les llegue sin "moches" y es que aún se duelen del inesperado recorte que les aplicó el partido para apoyar a los damnificados del sismo del 19S. No les pidieron opinión. Ni siquiera les avisaron. 

Muchos de ellos esperaban el pago salarial del 10 de septiembre para recuperarse de las "vueltas" que hicieron a México para reunirse con el Presidente electo, previo a sentarse en la curul. No hubo viáticos. 

Las cámaras de diputados y senadores ya cambiaron. Qué bueno que se canceló el bono inicial para compra de vehículos y computadoras. Qué bien que se suspendió el pago de asesores externos y que ya no se pagarán viajes internacionales o comidas en restaurantes exclusivos con bebidas extravagantes. 

 

Si el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador pone la muestra al viajar en línea comercial, resulta positiva la medida de que los legisladores dejen de viajar en primera clase pero...

Llegar al extremo de limitar las tazas de café y entregar una botella de agua por legislador es... un exceso.

Se trata de una medida populista, dijo el coordinador parlamentario del PRI en el Senado, Miguel Ángel Osorio Chong, que hace unos días criticó algunos puntos. 

 

Reconoció que el pueblo mexicano demanda austeridad en la clase gobernante, pero que éstas rayan en el populismo. 

 

La declaración fue en ocasión de una fotografía en la que el ex secretario de Gobernación aparece con un vaso de cartón comiendo mango picado, que -dijo- le ofreció un compañero senador. 

De cualquier manera, la austeridad republicana ya llegó al Congreso de la Unión y en medio de las novedades, son los diputados aliados del futuro sexenio los más castigados. 

La reducción a los ya limitados ingresos para apoyar a los damnificados del sismo se extendió a los legisladores del Partido Encuentro Social que ante la inminente desaparición podría mantenerse como bancada pero atendiendo los intereses de MORENA. 

Y Andrés Manuel López Obrador dejó de lado su postura de reconciliación nacional y culpó a Felipe Calderón de desatar la violencia y la inseguridad en México en el afán de legitimar su presidencia.  

Aseguró que los tráileres con cuerpos humanos que se "pasearon" por Jalisco, son resultado del fraude electoral que se cometió en el 2006. 

"No ganaron la elección del 2006, impusieron al presidente y él, para legitimarse, le declaró la guerra al narcotráfico y le pegó un garrotazo al avispero. Desde entonces hay mucha violencia en el país", dijo. 

"El origen de todo fue el fraude electoral, no hay que olvidarlo".

Las declaraciones del presidente electo, -como en sus tiempos de campaña-, no tuvieron reacción. Al menos no en el Presidente Felipe Calderón, siempre tan presto a responder desde su cuenta de Twitter con más cinco millones de seguidores. 

maribelvillarreal@hotmail.es