Juanito quiere estudiar la ‘prepa’ y ayudar a su abuela

Es un joven con discapacidad que desea continuar estudiando y conseguir un empleo

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Desde que nació, la vida le aplica las pruebas más difíciles a Juan Guerrero, un chico con discapacidad que sueña con un empleo para ayudar a su abuelita y estudiar la preparatoria en línea. 

Juanito, como le conocen en el rumbo de la tienda Gran’D Estación, fue paquetero desde los 8 años pero al cumplir la mayoría de edad quedó a la deriva.

Ahora Juanito hace mandados a los empleados de la misma tienda y vende bolis, mientras espera la salida de su abuelita, quien es paquetera, para ir juntos a casa.

Juanito quiere tener un coche aunque sea “viejito” para que su abuela no se canse, cuando regresan a casa en medio de la noche, pero sabe que primero debe conseguir un empleo. 

No se rinde y en cambio saca fuerzas 
No se rinde y en cambio saca fuerzas 

“Cuando tenía 7 meses de nacido tuve un accidente junto con mis padres y mi hermana. Mi papá manejaba una pipa de gas que explotó… mi papá murió ahí y también mi hermanita. Mi mamá quedó lastimada de sus rodillas”. 

Juanito se crió con su abuela, que lo enseñó a trabajar al igual que ella, a pesar que en el accidente perdió el ojo izquierdo. 

“A los 8 años entré de paqueterito a la tienda, sé lavar trastes, sé cocinar, sé de tecnología, terminé la secundaria y ahora quiero estudiar la preparatoria en línea”, comenta. 

A las afueras de la tienda de autoservicio Juanito es como un ángel para las personas a las que lleva el carrito de mandado hasta el estacionamiento; siempre amable y educado. 

“Mi abuela es lo más importante para mí, quisiera ayudarla más. Ya metí solicitudes en Coppel y en la misma tienda, pero aún no me han contestado. Yo quiero hacer una carrera profesional”, platica. 

No se rinde y en cambio saca fuerzas 
No se rinde y en cambio saca fuerzas 

Al terminar la jornada laboral de su abuelita, los dos caminan a casa durante más de 40 minutos sin importar que es medianoche, porque ellos no tienen otras opciones. 

“Tenemos una televisión que nos dio él gobierno y una cama donde dormimos los dos, cada uno en una orilla. La casita de mi abuela ya está a punto de caerse de vieja que está. Los gobernadores que han pasado por aquí no nos han ayudado “. 

Es admirable la tenacidad de Juanito, joven de carácter optimista que  sueña con encontrar un trabajo que le permita mirar al futuro con esperanza. 

¿QUIERES APOYARLO? 

Si quieres ayudar a Juanito y su abuela aportando láminas para un techo nuevo, ellos viven en el número 145 de las Calles 27 Hidalgo y Morelos.