Se engañan solos
MÁS TAMAULIPECOS A SAGARPA.- Otro tamaulipeco (por adopción, porque en realidad nació en Monclova, Coahuila), se integró a las filas de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación en el país.
Se trata del médico veterinario, Jorge Luis Zertuche Rodríguez, quien recibió nombramiento como Subsecretario de Agricultura.
Zertuche, quien se desempeñaba como Subdelegado Agropecuario de la delegación estatal de la Sagarpa, recibió el nombramiento de Baltazar Hinojosa Ochoa.
Se trata, sin duda de una buena adquisición porque Zertuche cuenta con experiencia y trayectoria en el tema agropecuario y, sobre todo, es un hombre probo.
Nos dicen que en cualquier momento otros tamaulipecos se sumarán al equipo de Baltazar. Identifican entre ellos a Carlos Solís Gómez, ex presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado y Secretario de Desarrollo Rural en la anterior administración estatal. Iría a una Subsecretaría.
También espera turno Jesús Collado, para asumir la jefatura de asesores de la Sagarpa. Eso dicen, que conste.
DENSE PRISA.- Por cierto, el nuevo Secretario de Agricultura en el país, Baltazar Hinojosa Ochoa, tendrá que darse prisa en resolver el prolongado conflicto que enfrenta la dependencia con productores tamaulipecos por el adeudo de casi mil millones de pesos en subsidios.
Es claro que los problemas de la Sagarpa son mucho más amplios y diversos, pero sin duda que por su calidad de tamaulipeco Baltazar está doblemente obligado a darle prioridad a la entidad.
Desde luego que no es cosa fácil destrabar el problema porque la Sagarpa está a expensas de que la Secretaría de Hacienda le libere los recursos necesarios, pero eso ya es parte de la habilidad que deberá mostrar el nuevo responsable de la política agropecuaria en la nación.
Lo único cierto es que el conflicto tamaulipeco no puede esperar porque el enojo de los afectados crece cada día más. Ayer bloquearon la carretera a Matamoros por sexta ocasión en el año.
ÚLTIMO DIA.- Hoy a media noche cierran los registros para quienes participarán en la elección local del uno de julio.
De hecho ya la gran mayoría de los candidatos y sus planillas entregaron la documentación al IETAM, pero todavía hay algunos que decidieron esperar al último día.
Ha quedado claro que sigue muy arraigada esa creencia entre los políticos, de que a los registros hay que llevar el mayor número de acompañantes para demostrar músculo político.
Así lo hicieron aquí, por ejemplo, los candidatos a la alcaldía capitalina, el abanderado de la coalición PAN, MC y PRD, “Por Tamaulipas al Frente”, Xicoténcatl González Uresti, y el “gallo” del PRI, Óscar Almaraz Smer, quienes se hicieron acompañar por una multitud.
Pero igual lo hicieron en Tampico, la priista Magdalena Peraza, y el abanderado del PAN, MC y PRD, Jesús Nader, como sucedió con Maki Ortiz Domínguez en Reynosa.
Alguien tiene que decirles, sin embargo, a todos ellos, que la elección la gana quien recibe más votos en las urnas y no el que lleva más acarreados a los registros o a los mítines.
Porque seamos serios: la gran mayoría de quienes acuden a esos eventos lo hacen por obligación o porque les pagan. Si acaso uno de cada diez va por convicción.
Entonces, el candidato que crea que acarreando más gente demuestra poder, se está engañando solo.
TERMÓMETRO.- Lo que sí es un hecho es que la elección del uno de julio será un buen termómetro para el panismo tamaulipeco.
En función del resultado que obtenga en las urnas, sabrán cuál es su realidad.
Vale la reflexión porque el discurso de algunos candidatos blanquiazules es de mucho optimismo e incluso varios ya se sienten triunfadores, y ya se sabe que la confianza es mala consejera.
ASÍ ANDAN LAS COSAS
roger_rogelio@hotmail.com