Geño: extradición, regalo de cumpleaños

El traslado de Eugenio Hernández a una prisión federal no solo trata de cuidar su integridad física, hay algo más de fondo. 

Por eso su defensa ha sido la primera en oponerse a la medida y ha solicitado que el ex gobernador no deje el CEDES de la capital. 

Y es que su traslado hacia una prisión federal, en este caso a Matamoros, serviría par acelerar el proceso de extradición, no solo por la cercanía geográfica sino también por el entramado legal que existe en un evento de esta naturaleza. 

Después de que los Estados Unidos hicieron la solicitud de extradición de Hernández Flores, le toca a la Secretaría de Relaciones Exteriores analizar la petición, y si considera que hay elementos suficientes turnarla a la Procuraduría General de la República para que esta notifique a un juez de distrito.

Hecho esto, Eugenio será internado previamente por 60 días en un lugar designado por el juez, y la SRE notifica al país solicitante. En este caso a los Estados Unidos. 

Y aquí es donde entra la importancia del traslado, pues al pasar del CEDES de Victoria al de Matamoros, se iniciaría la cuenta regresiva de esos 60 días. 

Después de esto, un juez de distrito informaría al ex gobernador las causas de la petición de extradición y este puede nombrar a un defensor, para realizar la audiencia principal. 

Donde se le puede conceder la libertad bajo fianza o dar luz verde al proceso de extradición. 

Y aunque el juez dé a la SRE una opinión jurídica en la que considere procedente la extradición, la decisión final recae en la propia Cancillería.

Esto implica que el proceso pueda tardar de seis meses a un año, aunque de ser urgente podría tomar solo unos días. 

Aquí es donde entra el juego político del Gobierno Federal, quien tiene dos opciones; acelerar el proceso o alargar el trámite para que Eugenio Hernández no enfrente a la justicia de los Estados Unidos. 

Sin embargo, el calendario juega en contra del PRI y el propio Gobierno Federal, y es que entre más se alargue la extradición, más se acercará al proceso electoral de 2018. 

En definitiva, ni Peña Nieto ni el Revolucionario Institucional quieren verse en una campaña electoral donde los señalamientos sobre la corrupción de sus ex gobernadores (incluidos el propio Tomás Yarrington y Eugenio Hernández) sean el tema principal.

Por eso la SRE no puede frenar la extradición pues el resultado sería desastroso, ya que el proceso legal en contra del ex gobernador se realizaría en Tamaulipas, teniendo un impacto mediático mayor al estar fuera de control del gobierno federal y muy cerca en cambio de los partidos y candidatos de oposición.  

Así que todo indica que la SRE tomará una decisión expedita y acelerará en la medida de sus posibilidades el traslado de Geño a los Estados Unidos. 

A estas alturas seguramente se habrá dado cuenta que nadie ha movido un dedo para ayudar al ex gobernador priista. Ni dentro de Tamaulipas ni en el centro del país. 

Hasta Almaraz, el delfín de Eugenio a la gubernatura, hace todo lo posible por desmarcarse y quitarse la etiqueta geñista. Y si eso hace su brazo derecho y operador financiero, que se puede esperar de el resto de ‘amigos’ y colaboradores. 

Tampoco hay que olvidar que el ex gobernador es el primer detenido de una larga lista de cómplices, muchos de ellos servidores públicos en gobiernos priistas, que pueden negociar penas menos severas a cambio de brindar más evidencias contra Eugenio. 

Así que espere noticias de su extradición en los próximos días. No dude que sea el primer regalo que le llegue mañana, día de su cumpleaños.

Eugenio es una bomba de tiempo que está a punto de explotar, y es de interés para todas las autoridades que lo haga en los Estados Unidos y de preferencia antes de que Tomás Yarrington empiece a hablar. 

Pues eso. 

Es bueno saberlo: 1) La alcaldesa de Reynosa por fin se quitó la máscara al acudir este sábado como una priista más al informe de Edgar Melhem. Su presencia fue más allá de una cortesía política; el color verde de su blusa, su acercamiento con María Esther Camargo, pero sobre todo con Cesar Camacho, confirmaron lo que la dirigencia estatal del PAN ha venido sospechando: Maki ha puesto la estructura del municipio al servicio del PRI, razón suficiente para que su partido no la postule a un segundo periodo. Y es que ahora ni su madrina Margarita Zavala será capaz de ayudarla. 

2) La terquedad de Almaraz por realizar las obras de remodelación del 17 tiene una motivación económica. Es un pretexto pues para justificar el gasto de 300 millones que recibió la capital de presupuesto extra y que sirve de paso para beneficiar a sus amigos, como ese empresario ‘futbolero’ que le regaló a su futuro yerno parte de la obra como dote antes de la boda.  x