Candidatos a la reelección

Los mexicanos iremos a las urnas en el 2018 para elegir al sucesor de Enrique Peña Nieto, y a los 500 nuevos usufructuarios de las curules en la Cámara de Diputados y los 128 de la Cámara de Senadores.
Sin embargo, para los tamaulipecos en particular el proceso electoral del año próximo tendrá una relevancia más significativa porque estrenaremos la figura de la reelección.
Así es. Por primera vez en la historia democrática de Tamaulipas,  los ciudadanos tendremos oportunidad de reelegir a los alcaldes.
No obstante, la pregunta es: ¿Cuántos de los  actuales 43 Presidentes Municipales de Tamaulipas han hecho realmente méritos para repetir por tres años en el cargo?
Seguramente serán los mismos habitantes de cada municipio los que tengan la mejor respuesta, pero si me pregunta a mí le diré que no son muchos los que están en esa posibilidad.  
Analizar a cada uno de los 43 jefes edilicios requeriría de mayor espacio del que disponemos, por lo que reduciremos la evaluación hacia aquellos de los municipios más grandes y representativos.
Empecemos por el norte. Sin duda, el alcalde panista de Nuevo Laredo, Enrique Rivas Cuéllar es el que mayor méritos ha hecho para mantenerse al frente del gobierno del municipio más importante del país.
El exdiputado local ha sabido responder a las expectativas de los neolaredenses, lo cual lo mantiene en altísimos niveles de popularidad.
Además, su política de transparencia y rendición de cuentas en el ejercicio de su mandato, ha sido signo distintivo de su gobierno, lo cual abona a su favor.
A ello habría que sumarle que Rivas es uno de los alcaldes más cercanos al gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca.
Por todo ello, se coloca como uno de los que podrán mantenerse otros tres años en el Gobierno municipal.
En cambio, en Reynosa, la alcaldesa Maki Esther Ortiz Domínguez, ha desgastado tanto su figura en pleitos con sus regidores, síndicos, y con grupos de su mismo partido, el PAN, que difícilmente podrá conseguir un segundo periodo al frente de ese Ayuntamiento.
Pero más allá de eso su principal obstáculo es la falta de empatía con las jerarquías del Gobierno estatal, lo cual es una loza porque Reynosa es la tierra del Gobernador.
El Presidente Municipal priista de Matamoros, Jesús de la Garza, también tiene posibilidades de aspirar a la reelección.
No obstante y a pesar de que su administración ha hecho una labor destacable en el primer año de ejercicio, tendrá que batallar mucho para conseguir un segundo periodo porque Matamoros es un objetivo prioritario para el PAN en el 2018.
Allá en el sur, los alcaldes de Tampico, Madero y Altamira, definitivamente quieren la reelección. 
El problema es que ninguno tiene méritos para lograrlo.
El trabajo de la Tampiqueña Magdalena Peraza, ha sido tan pobre que sería un absurdo que el PRI se arriesgara a colocarla nuevamente de candidata. Y menos cuando los panistas también tienen a ese municipio en su lista de objetivos prioritarios.
En Madero, Andrés Zorrilla, es por mucho el peor alcalde tamaulipeco. Se ha dedicado a todo menos a trabajar en favor de los maderenses.
Quizá la única que tiene reales posibilidades de aspirar a la reelección en esa zona del Estado, es la alcaldesa de Altamira, Alma Laura Amparán.
Su labor en el primer año de Gobierno ha superado con creces lo que hicieron sus antecesores, y lo más destacable de ello es que lo ha hecho sin endeudar al municipio.
Como quiera que sea, no falta mucho para que las dirigencias partidistas se definan en ese tema de a quienes apoyarán para la reelección.

ASÍ ANDAN LAS COSAS
roger_rogelio@hotmail.com