Ya no hay dolor hermosa Emily; ve con Dios 

Emily Cataleya luchó contra el cáncer de médula; ya descansa en paz #CdVictoria #Tamaulipas 

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Emily Cataleya ganó la victoria: cumplió el propósito de Dios en la vida de miles de personas. Ahora es un ángel al servicio de su Señor Jesucristo.

A los 3 años de edad la pequeña y valiente guerrera que vino de Matamoros, ya alababa a Cristo, motivada por sus padres, Alfonso Viera y Becky Hernández.

Emily Cataleya además de ganar el corazón de Dios, conquistó el corazón de miles de personas que admiraban su lucha contra el monstruo que es el cáncer.

 

En el Hospital dejó amigos y admiradores, niños y niñas que como ella libran una guerra contra un enemigo gigante y que supo ganarse con una sonrisa y su valentía para enfrentar el dolor.

Un cuerpo pequeño lleno de un espíritu grande, sin duda el espíritu de Dios habitaba a Emily para decir y mostrar amor y compasión, fraternidad, bondad en este difícil tiempo.

Su padre Alfonso Viera, conocido como Don Poncho, agradece a los amigos y familiares que estuvieron pendientes de Emily.

 

"Ya no habrá dolor para ella, hoy se bajó de la silla de ruedas y llegó a los brazos de nuestro Señor Jesucristo. Bendeciré a Jehová en todo tiempo y su alabanza estará de continuo en mi boca”, dijo.

El sábado Emily fue objeto de un homenaje: un concierto que además de recaudar fondos para ella, reconoció su lucha contra el cáncer.

Fueron 2 años de lucha, un trasplante de médula y un tumor que regresó más agresivo y con el que fue imposible luchar más en el plano terrenal.

 

Junto a Dios  Emily peleó su última batalla que finalmente ganó ayer domingo, al levantar sus alitas de ángel y regresar a casa.

La voluntad de Dios es siempre buena, agradable y perfecta; ya no sientes dolor, hermoso ángel de Dios.

No cabe duda que la corta estancia de Emily en esta tierra, transformó la vida de muchas personas, movió los corazones a la misericordia y al amor al prójimo.

 

Sigamos apoyando como sociedad a niños y niñas que como Emily enfrentan esta terrible enfermedad.

Gracias por las oraciones y apoyo a Emily, gracias a médicos y enfermeras que la atendieron, gracias a las tías de corazón, gracias a Dios.

¡Vuela alto hermoso ángel, Super Emily !