Vende totopos, salsas y piñatas para salir adelante 

La señora Cruz Reyes es un ejemplo. Todos los domingos la encuentras, en el tianguis La Paz 

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-Con la venta de totopos, salsas caseras y hasta piñatas, Cruz Reyes Gaytán es una muestra que el ingenio femenino puede dominar el mundo. 

Cruz Reyes es una mujer sencilla que nació en Güémez, una madre de familia que sacó adelante a tres hijos con el trabajo más esforzado, el trabajo que se realiza con manos e implica esfuerzo físico. 

Desde el viernes por la tarde Cruz comienza a preparar la venta que llevará el domingo al tianguis de la Paz. 
 

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“Para los totopos ya tengo clientes seguros, la gente del tianguis ya conoce mis totopos y hasta llegan a buscarme hasta la casa”, comenta. 

Los totopos de Cruz llevan limón, salsa roja que ella misma prepara de manera especial, y un poco de queso fresco, un estilo muy casero. 

Hace dos años aproximadamente Cruz comenzó con la venta de los productos en el tianguis con gran éxito. 
 

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Es madre de tres hijos y se esfuerza 

“Es un negocio muy humilde que comencé con 350 pesos de la tarjeta de vales de despensa de uno de mis hijos, con ese dinero realicé la primera compra de ingredientes”. 

Cruz aprendió a trabajar en el rancho, cuando formó una familia y nacieron sus tres hijos.

“Vendía lo que podía mientras mis hijos estaban en las escuelas, trabajé en casas haciendo limpieza, luego nos fuimos a vivir un tiempo a Matamoros y trabajé en la maquiladora, pero llevaba a vender platillos a los compañeros”. 
 

La necesidad la obligó a inventar los totopos con salsa casera y queso, y las salsas caseras que vende en frascos de vidrio que recicla. 
 

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Hace sacrificios, pero quiere ganarse la vida honestamente 

“Necesitábamos pagar la renta, recibos de agua y luz, aunque mi esposo me ayuda con la venta de verduras, no es suficiente”. 

Cruz Reyes de 48 años es un ejemplo de tenacidad y trabajo, no se le cierra el mundo y aprovecha los recursos que tiene a su alcance, apenas una parrilla de gas y una pequeña cocina son todas sus herramientas. 

“Todo es natural, sin conservadores, la salsa lleva cebolla, chile picado y tomate, todo va guisado, cada frasco lo vendo en 30 pesos”. 

Pero las sorpresas no acaban, porque Cruz también vende semillas de girasol y de calabaza, tortillas de harina y chiles rellenos. 

También hace piñatas de diferentes personajes, moños para el cabello y quizá un día tenga su propia empresa de salsas o de totopos. 

Si quieren probar los totopos y las salsas caseras de Cruz ella se encuentra todos los domingos en el tianguis de la Avenida La Paz, sobre la Avenida las Torres y Calle Juan Osorio. 

“Todo esto implica un esfuerzo y cansancio pero sólo así podemos salir adelante de manera honesta, mis hijos ya se casaron y lo mejor que les puedo dar es un buen ejemplo de trabajo”, dice Cruz Reyes. 

 

PIE DE FOTO 3.- Hace sacrificios, pero quiere ganarse la vida honestamente