Historias Cotidianas: Doña Marina, todos los días abre su negocio  que ha sacado sola adelante 

Salió de Bustamante a los 13 años, buscando una vida mejor 

Ciudad Victoria, Tamaulipas; Cuando solo tenía 13 años de edad, Marina García decidió dejar el lugar que la vio nacer, el municipio de Bustamante. 

Aunque estaba muy pequeña, ella aspiraba a una vida mejor, no le gustaba la pobreza en la que vivía. 

"A mi nunca me gustó la pobreza, nunca pensé en casarme con un campesino y quedarme a vivir así, con tantas carencias", dice. 

Desde su local de gorditas y flautas, ubicado en la calle del 10 Ceros, sobre la avenida 16 de Septiembre, a un lado de lo que antes era la Policía Ministerial, ahora Policía Investigadora, platica que llegó a Ciudad Victoria siendo una jovencita. 

Nos comenta que aquí se casó y tuvo dos hijos, pero también  aquí se divorció. 

"Me divorcio estando embarazada de mi segundo hijo, así me fui a trabajar a Matamoros, allá duré 24 años trabajando en un restaurante". 

La enfermedad de su mamá hizo a Marina que regresara a Victoria; desde entonces, desde hace 22 años, renta el local donde vende sus sabrosas gorditas y flautas. 

A sus 62 años de edad Marina sigue siendo una mujer muy decidida; vive solita en su casa y también ella se encarga de su negocio. 

Quizá a muchos no les agrade su carácter fuerte, pero la vida no ha sido fácil para ella. 

Hace 23 años desapareció uno de sus dos hijos cuando solamente tenía 17 años. 

"Ahorita mi hijo tendría 40 años, pero ya nunca volví a saber nada de él, sí es difícil porque nunca se me voy a olvidar de mi hijo". 

Así, con su pena, Marina se levanta todos los días a la una de la mañana a preparar los guisos para sus gorditas. 

'Las Cazuelas', como se llama su negocio, abre de 7 de la mañana a 3 de la tarde, de lunes a domingo.  

Tiene una gran variedad de guisos: huevito verde, huevito rojo, chicharrón, picadillo, nopalitos, además de otros. 

Ojalá tengas oportunidad de probar las gorditas de esta incansable y valiente mujer.