Historia Cotidianas: Doña Margarita y su puesto peligran debido a Gattas
Ciudad Victoria, Tamaulipas .- Hace 17 años Margarita Ramírez comenzó a vender gorditas por el Hospital Infantil; su puesto fue el primero que se puso aquí, en la avenida del Maestro, entrada al fraccionamiento Las Flores.
La mujer de 72 años de edad vive de esto, de lo que gana con la venta de sus gorditas, flautas, sopes, café y avena.
Sin embargo la encontramos muy angustiada; y es que hace unos días recibió una notificación del alcalde Eduardo Gattás avisándole a ella y demás carretoneros que deberán retirar sus puestos de este lugar.
"Todos los días le pido a la Virgencita de Guadalupe que no me desalojen, yo vivo de esto, a mí nadie me ayuda", dice.
Mientras prepara unos huevitos con chorizo platica que Gattás los quiere mandar a una calle solitaria, por donde nadie transita, lejos de este hospital.
“Dice Gattás que nos va a desalojar porque no venimos a vender, porque los carretones están solos y eso no es cierto porque llueva truene o relmpagueé yo siempre estoy aquí, vendiendo", comenta.
Y así es, aunque todos los días se viene a pie desde la colonia Manuel A. Ravizé y pese a que las ventas ya no son tan buenas como cuando inició Margarita, no falla.
Un ejemplo de ello es que aún con el intenso frío de esta mañana de martes está al pie del cañón, esperando a sus clientes desde su carretón.
Margarita quedó viuda hace 20 años, tiene tres hijas pero ninguna la ayuda; ella las justifica con el argumento de que ya están casadas, de que tienen sus propios gastos.
Ojalá que la virgencita de Guadalupe escuche las súplicas de esta trabajadora e incansable mujer y no la quiten de este lugar donde ya tiene sus clientes.
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