Discípulas de Jesús  ayudan a las mujeres 

Les transmiten conocimientos sobre oficios, incluso les ayudan a emprender negocios, para mejorar su calidad de vida. 

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- La Casa de Desarrollo Integral de las Discípulas de Jesús (DIJAC) es desde hace 7 años uno de los Centros más importantes de apoyo social a mujeres en situación vulnerable. 

Los talleres de belleza, cocina, corte y confección, bisutería, computación básica, cuidados infantiles, manualidades, transforman la vida de mujeres que viven en condiciones vulnerables.

La madre Claudia Hernández Pérez, Directora General de la casa de Desarrollo, tuvo la visión del proyecto hace 7 años. 

El proyecto inició hace 7 años, gracias a la visión de la Madre Claudia Hernández Pérez
El proyecto inició hace 7 años, gracias a la visión de la Madre Claudia Hernández Pérez

“Yo empecé a trabajar en Cáritas, puede decirse que fue mi primera escuela. Hace 7 años compramos este terreno y en lo que pensé de inmediato fue en un proyecto social que enseñara a pescar a la mujer, a desarrollar un carácter emprendedor que las ayude a salir de las condiciones de pobreza y que con el conocimiento de Dios, se fortalezcan espiritualmente”, comenta. 

Y es que para la Madre Claudia el estar en Dios propicia la fuerza, la fe y la confianza en sí mismas.

“A lo mejor son madres solteras, o mujeres casadas que sus esposos no ganan lo suficiente y ellas pueden vender sus productos y ayudar a la economía de la familia. Muchas se han hecho empresarias, han tocado puertas para microcréditos y han emprendido en la confección”, comparte. 

Todos los talleres se imparten de manera gratuita, sólo se pide una cuota de recuperación de 50 pesos.

Los talleres son gratuitos
Los talleres son gratuitos

“Pero si son personas que no tienen recursos, no se les exige la cuota de recuperación y se les dan las clases. Si no tienen para la inversión se les da el recurso y cuando ellas venden el producto nos regresan la cantidad y se quedan con su ganancia”, explica. 

En el taller de cocina las mujeres aprenden a hornear galletas de avena y de chocolate, empanadas, y otros platillos como el ceviche y los tradicionales tamales. 

“Todos las maestras son voluntarias, porque aquí no tenemos apoyo de gobierno, tenemos que buscar nuestros recursos y lo hacemos con la venta de repostería”, comenta la Madre Claudia. 

Además, en la casa se encuentra el área de cuidados infantiles, donde estudiantes del Quinto Semestre de Trabajo Social realizan sus prácticas y se encargan de cuidar a los niños, mientras sus madres toman el taller. 

También hay clases complementarias de nutrición, proyectos productivos
También hay clases complementarias de nutrición, proyectos productivos

Los cursos tienen una duración de tres meses y se imparten todo el año.

“Hay mujeres que no pueden venir entre semana y por ello tenemos talleres también los sábados”. 

Los talleres que se imparten son: belleza, cocina, corte y confección, bisutería, computación básica, cuidados infantiles y manualidades. 

Las clases complementarias son: proyectos productivos, nutrición y desarrollo integral. 

Para superar la situación económica difícil y seguir atendiendo a la población de mujeres vulnerables en DIJAC promueven una red de donativos:

“No nos queda tiempo para salir a buscar donativos, a tocar puertas, entonces tenemos esta red que significa que los que gusten ayudar pueden aportar 50 pesos mensuales”. 

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+¿QUIERES INSCRIBIRTE O APOYAR?: 

Para inscribirte a los talleres o contribuir con un donativo puedes acudir a la Casa DIJAC que se ubica en la Calle Sarita Peña de Camargo, número 406, en Fraccionamiento La Paz en contraesquina de la gasolinera. 

Para mayor información llama al teléfono 834 34 006 95.