Ambulante concientiza en la calle Hidalgo sobre Covid

José Héctor teme al cierre de negocios no esenciales pues, del comercio callejero, obtiene el sustento diario y da estudios universitarios a su hijo

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- José Héctor Zavala teme que el número de contagios activos de Covid-19 se dispare en Victoria, al grado de que las autoridades federales y estatales de Salud ordenen el cierre de negocios no esenciales, tal y como ocurrió en el pasado mes de junio.

Este vendedor ambulante dice que tuvo serios problemas económicos, cuando se prohibieron temporalmente los tianguis y los puestos ambulantes en esta capital.

De tal manera que, armado con una bocina y un micrófono, ha estado recorriendo la zona comercial de la calle Hidalgo en su triciclo, para exhortar a los miles de consumidores, que están realizando compras de fin de año de la misma, para que usen el tapabocas y respeten la sana distancia.

Aclara que nadie le da un solo peso por realizar esta labor, mientras vende botanas y otros productos.

Indica que hace esta concientización porque no sólo está en juego el sustento diario de su familia, sino también los estudios de su hijo, que acaba de pasar a octavo semestre en la Universidad.

“Ahorita mi hijo está estudiando la Universidad”, declara.

“Esta última semana terminó su último examen... acaba de terminar el séptimo semestre, va para octavo; y yo de aquí (de mis ventas) le doy para el estudio, pero mucha gente irresponsable no se pone el cubrebocas”.

José Héctor cuenta que también le ha tocado sufrir esta pandemia en su familia, pues uno de sus cuñados se contagió de Covid-19 y acabó entubado en un hospital, del cual fue dado de alta, pero su salud quedó muy deteriorada.

De tal manera que en sus arengas a la población les dice, que tal parece que muchos andan buscando enfermar, para finalmente darse cuenta, que este virus no es un invento ó un juego.

“Primero los saludo, les doy las buenas tardes ó los buenos días, depende del horario en que llegue aquí a la calle Hidalgo”, expresa.

“Muchos lo toman a mal, porque no les importa la vida de los demás, pero el día que lleguen a estar entubados ó lleguen a caer en cama ó lleguen a ponerles oxígeno así como le pusieron a mi cuñado...”, agrega.

Este vendedor fue abordado frente a la tienda Del Sol ubicada en la calle Hidalgo entre 11 y 12, cuando exigía a los empleados de dicho lugar, que salieran a poner orden a la fila de personas, que afuera estaban amontonadas queriendo entrar.

“Usted lo ve como reportero, usted se está dando cuenta, que muchos ciudadanos no guardan la distancia; o sea, no hay necesidad que salga el personal de las tiendas a cada rato y a cada rato, como si fueran niños”, externa.