Ama dar vida a la madera

Tiene 84 años, y en el carretón que construyó, Manuel vende productos

Ciudad Victoria, Tamaulipas.-  Hace tres años Manuel Torres Soto -de 84 años de edad-  fabricó un carretón de madera para vender productos por las calles y ganarse unos pesos. 

Los domingos por las mañanas, en el tianguis de la conocida como Avenida La Paz, se puede ver a Manuel en la venta de bolis, naranjas, toronjas y cacahuates. 

“Antes vendía por las calles de la Colonia, cerca de la escuela, pero ahora sólo los domingos en el tianguis. Aunque no tengo enfermedades, me duelen los huesos y ya no puedo andar como antes manejando el carretón”, dice Manuel. 

Es una ejemplo para los jóvenes que se resisten a autoemplearse
Es una ejemplo para los jóvenes que se resisten a autoemplearse

El carretón lleva una silla sobre la cual se sube Manuel para manejar. También lleva un banco de madera (para sentarse), y unos cajones para guardar mercancía. 

El techo del carretón es de tela que lo cubre del sol y de la lluvia; no le gusta utilizar materiales plásticos.

“Las personas han cambiado la madera por los objetos de plástico que contaminan más pero son más baratos”, comenta. 

Con una actitud positiva y hasta una sonrisa, Don Manuel es un ejemplo de sobrevivencia y creatividad. 

Hasta hace pocos meses, hacía catres para dormir, mesas rústicas, carretillas y mecedoras, pero el alto costo de la madera lo mantiene alejado de la actividad que tanto le gusta. 

Tiene la fortaleza necesaria para aportar un extra a su familia
Tiene la fortaleza necesaria para aportar un extra a su familia

“Las personas no quieren pagar lo que cuesta un mueble de madera ahora. Se gasta mucho en luz y herramientas, por eso sólo hago muebles para uso personal”. 

Lo que más le gusta es darle forma a un pedazo de madera. Cuando está a punto de dormir se imagina que hace una mesa, una silla, un catre, es algo que no puede evitar,

“Así me hizo Dios, yo creo que ninguna persona piensa igual que otra y a mí me dio el talento de la creatividad y la imaginación”. 

Durante 10 años de su vida Don Manuel se dedicó a la compra y venta de madera, ahí “agarró” el gusto por la carpintería.

“Mi esposa y yo tuvimos 9 hijos que ya tienen su propia familia y a veces nos ayudan, también tenemos apoyo social, con ese apoyo pagamos los recibos del agua y de luz, pero hay que salir a ganarse los alimentos con las ventas del carretón, es necesario porque todo es muy caro que ningún dinero parece alcanzar”. 

Don Manuel no tiene madera para realizar sus creaciones, si alguien gusta y puede apoyarlo con un poco de material puede acudir a la Colonia Satélite 1, calle Neptuno con Plutón, manzana 33 número 4112. 

¡Apóyemos a los adultos mayores que aún son productivos!